Si creciste entre los 80 y los 90 es muy posible que hayas visto que tu mamá y tías usaran el cabello rizado, y desde entonces surgió tu inquietud por hacer en tu cabello el famoso “permanente”; desgraciadamente, muchas estilistas se negaron a hacértelo. Algunas argumentaron que tu cabello no tenía la estructura para poder moldear los rizos y muchas otras simplemente no desearon hacerlo debido a lo complicado del asunto. Pero una nueva era ha llegado y la mayoría de las supermodelos están regresando a esta tendencia.
Hace algunas semanas, Gigi y Bella Hadid aparecieron con el cabello extremadamente rizado en sus cuentas de Instagram y desde entonces surgió la interrogante: ¿el permanente ha regresado? Todo indica que sí. Por desgracia, sigue generando debate al momento de hacerlo, pues para poder rizar el cabello es necesario un tratamiento químico y un proceso que puede llegar a estropearlo, no en vano muchos estilistas se niegan. Pero si estás planeando hacerte el permanente, entonces esto es lo que debes saber.
Las hermanas Hadid trajeron de regreso los famosos permanentes
La melena ochentera fue traída de vuelta gracias a las hermanas Hadid y Karlie Kloss, quienes aparecieron con el cabello completamente rizado en la portada de la revista Vogue.
Pero antes de lucir el cabello de rockstar necesitas saber unas cuantas cosas…
El permanente es un proceso que estropea el cabello a causa de los químicos intensos que se emplean, algunos rompen los puentes de proteínas del pelo para poder formar los rizos, haciendo que se debilite, se seque y se caiga.
1. La técnica mejoró, pero no completamente
Algunos estilistas tienen la filosofía de que los permanentes estropean el cabello, por eso se niegan rotundamente a hacerlo. Pero la técnica tradicional ha experimentado un ligero cambio en los últimos años, especialmente en los productos usados, que son menos agresivos, y menos efectivos; algunos contienen ingredientes para el cuidado del cabello, como las proteínas se seda o el áloe vera para dar flexibilidad, humedad y elasticidad al rizo.
2. Los cabellos muy lisos no siempre son candidatos para el tratamiento
Aunque se pueden crear diferentes estilos de rizos en función del tamaño y la forma del rulo que se utilice y la colocación de los mismos, cuanto más natural sea el rizo más rápido pierde su forma. El problema se maximiza con los cabellos extremadamente lisos porque son más pesados y el liso toma más fuerza; por lo tanto, crear una ligera onda es más difícil. Si se quiere una onda pequeña como la de los 80 se puede conseguir un buen resultado, pero si se quiere una suave y grande es un trabajo imposible.
3. Los permanentes no se recomiendan mucho en cabello teñido
Aunque puede hacerse, si el cabello está muy maltratado, seco o decolorado, los productos químicos que se usan podrían dañarlo más. Por eso es importante que el experto que hará el trabajo conozca los antecedentes del cabello, así podrá aconsejar hacerlo o no.
4. Los permanentes pueden crear diferentes estilos de rizos
Hoy en día se busca un efecto más natural para rizar el cabello, pero todo depende de la longitud del cabello. Ahora en lugar de utilizar bigudíes se puede optar por rulos o bodys de goma, que son más blandos y permiten enroscar con más facilidad el cabello. Además, dependiendo de la colocación del cabello se puede conseguir un efecto distinto. Hay rulos que nacen desde la raíz, los que comienzan a media melena e incluso se puede hacer un permanente en la parte de abajo del cabello para dar volumen.
Se tiene que tomar en cuenta que si el cabello tiene una longitud de más de 30 centímetros es demasiado pesado para poder resistir los rizos.
5. Necesitan un cuidado especial
Teniendo en cuenta que es un proceso que debilita el cabello y que afecta su estructura interna, es necesario hidratarlo constantemente, pero sobre todo usar productos libres de alcohol. También debes dejarlo secar de manera natural, porque así evitarás castigar el pelo con calor y el rizo sera más bonito y con menos frizz. También recuerda lo que dijo Elle Woods: tienes que esperar de 24 a 48 horas para poder lavarlo o correrás el riesgo de que desactivar los químicos.