A veces lo único con lo que soñamos es tocar el cielo con las manos o quizá llegar un poco más allá, tal vez a la galaxia para sentarnos en un planeta solitario y disfrutar del silencio, la paz e inmensidad del universo. Por desgracia, esto no es posible.
Aun así, tenemos la opción de llevar un pequeño pedacito del universo en nuestro cuerpo y qué mejor manera de hacerlo que con un tatuaje. A continuación te dejamos algunas ideas para que hagas realidad esa pequeña fantasía.