La elegancia radica en la belleza y la simpleza, quien sabe combinar estos elementos, necesita muy pocas cosas para lucir sofisticada; la elegancia no solo se traduce en ropa, zapatos o maquillaje, sino en la actitud y el estilo de vida. Hablar de tatuajes debería ser considerado como parte de la vida moderna, pues si una modelo puede llevarlos y ser vista como alguien con estilo, nosotras también podemos.
No se necesitan trazos marcados, ni figuras extravagantes o de dimensiones enormes para expresar lo que sentimos, de hecho entre más pequeño y sutil sea, más cautivará a los demás. Solo hay que saber darles un espacio adecuado en nuestro cuerpo y mantenerlos coloridos, pues reflejan nuestra personalidad. El artista Hongdam conoce a la perfección esta mezcla de arte, diseño y elegancia y realiza tatuajes considerados entre los mejores del mundo.