La línea entre la ilusión y la realidad es tan delgada que cualquiera podría romperla, tal y como lo hace la artista del maquillaje Dain Yoon.
Yoon usa su rostro como lienzo en blanco para crear impresionantes ilusiones ópticas. Cada trabajo le toma de tres a cinco horas, y el resultado es digno de una serie de ciencia ficción.
La razón por la que comencé a pintar ilusiones es porque creo que las personas viven en ellas. Por ello, mis creaciones distorsionan la realidad y la percepción que generalmente comparten la mayoría de las personas.