La mayoría de las mujeres comienzan a planear su boda desde que son muy jóvenes. Cuando hallan al hombre con el que quieren pasar el resto de su vida, ya saben de qué color serán los adornos, qué tipo de recordatorios van a obsequiar y hasta las flores que adornarán el salón.
Pero para aquellas afortunadas que son parte de la realeza, sus bodas fueron planeadas mucho tiempo antes de que ellas nacieran. En el mundo los diferentes estilos que tiene las monarquías para las celebraciones son realmente espectaculares. Claro que en la actualidad han sufrido algunas modificaciones. Estas son las bodas contemporáneas de la realeza más sorprendentes.
1. Príncipe Guillermo y Catherine Middleton, Reino Unido
Su matrimonio causó una gran expectación a escala mundial. La transmisión en el canal real de YouTube atrajo a más de 72 millones de personas. A la ceremonia asistieron casi 1,900 invitados.
2. Archiduque Christoph y Adelaide Drapé-Frisch, Austria
La ceremonia religiosa tuvo lugar en la basílica Sait-Epvre, en Francia, y a ella acudieron la familia ducal de Luxemburgo, entre muchos otros invitados.
3. Príncipe Moulay Rachid y Oum Keltoum Bufares, Marruecos
Se realizó conforme a las tradiciones marroquíes y duró tres días. En la fotografía se puede ver a la pareja en la ceremonia de henna, que es un festejo acotado a la contrayente y las mujeres de su círculo, que se lleva a cabo para proteger a la novia de los malos espíritus y consiste en aplicar tintura por las manos y los pies, atrayendo la buena suerte a la unión.
4. Príncipe Ali bin al Hussein y Rym Brahimi, Jordania
Su matrimonio se realizó en la más estricta intimidad tras los muros del palacio Bait Al Barakah, y en presencia de Su Majestad, el rey Abdalá de Jordania, y su esposa. Los novios decidieron que en vez de la tradicional y fastuosa fiesta nupcial, se distribuyera el dinero que supondría tal celebración en forma de ayuda en alimentos para la gente necesitada de Jordania.
5. Príncipe Ernesto Augusto de Hannover y Ekaterina Malisheva, Alemania
La boda entre el príncipe y la diseñadora no fue del agrado del padre del novio, Ernesto de Hannover, por lo que él y su esposa, Carolina de Mónaco, fueron los grandes ausentes. Sin embargo, la ceremonia se llevó a cabo en la iglesia del Mercado de Hannolvar, en donde los novios demostraron una inmensa felicidad. El hermoso vestido fue diseñado por la libanesa Sandra Mansour.
6. Princesa Victoria y Daniel Westling, Suecia
La princesa heredera al trono y su ex entrenador personal contrajeron nupcias en la catedral de San Nicolás, de Estocolmo. Luego de ser declarados marido y mujer, ambos derramaron lágrimas de la emoción. Entre los invitados se encontraban distinguidos miembros de las casas reales europeas.
7. Príncipe Guillermo de Luxemburgo y Estefanía de Lannoy, Luxemburgo
En medio del tañer de campanas y bajo un arco triunfante de espadas desenvainadas formado por soldados, el príncipe y la condesa belga salieron sonrientes luego de contraer nupcias en la catedral de Nuestra Señora, culminando dos días de celebraciones.
8. Princesa Pengiran Haji Muhamad Ruzaini y Hajah Hafizah Sururul Bolkiah, Brunéi
Fue llamada la boda de ensueño y digna de las historias de Las mil y una noches. La princesa es hija de uno de los hombres más ricos de Asia, así que no se esperaba menos de su enlace nupcial. Se celebró en el suntuoso palacio real, que tiene mil 700 habitaciones. Los festejos duraron una semana.
9. Rey Jigme Khesar Namgyel Wangchuck y Jesun Pema, Bután
Durante las celebraciones del matrimonio del rey, las personas salieron a la calle a demostrar su alegría por el enlace de su soberano. Aunque solo algunos privilegiados pudieron asistir a la ceremonia, el país entero siguió la transmisión en directo. La pareja decidió no invitar a miembros de otras familias reales, pero sí quiso compartir su felicidad con su pueblo.
10. Príncipe Amadeo de Austria-Este y Elisabetta Rosbock von Wolkenstein, Bélgica
El sobrino del Rey de Bélgica y la aristócrata italiana contrajeron nupcias sin el permiso de su tío. Renunció a todos sus títulos y perdió su sucesión al trono, todo por amor. La boda se celebró en Roma y ahora viven en Nueva York y llevan una vida completamente normal.