¿Qué probabilidades existen de que seas devorado por una ballena como Geppetto? Tal vez pienses que ninguna y que todo depende de la suerte, pero tenemos una noticia para ti: Recientemente, ¡un hombre casi fue devorado por una ballena mientras estaba buceando! Así que las probabilidades de que te coma uno de estos enormes animales ya se redujeron.
El joven buzo corrió con mucha suerte, o quizá su sabor no era tan delicioso como creía, pues la ballena se arrepintió y lo escupió a la superficie luego de tenerlo durante un tiempo en su boca. Así fueron los angustiantes momentos que vivió este hombre.
El hombre que sobrevivió a ser devorado por una ballena
Michael Packard tiene 56 años y desde hace muchos años se dedica a la pesca de langostas. El 11 de junio, día en que ocurrió el incidente, se encontraba buceando en la costa de Provincetown, Massachusetts, Estados Unidos, cuando de repente sintió que estaba siendo “succionado”. Después se dio cuenta de que una ballena lo estaba comiendo. En una publicación de Facebook contó los angustiantes momentos que vivió.
Estuve en su boca cerrada entre 30 y 40 segundos antes de que emergiera a la superficie y me escupiera.
Tiene la mejor suerte del mundo
El buzo explicó que cuando estaba bajo el agua sintió un gran golpe y de repente todo se puso oscuro. En ese momento creyó estarse moviendo, pero siguió sin entender qué sucedía. Primero pensó que lo había mordido un tiburón y se había desmayado, pero luego se dio cuenta de que nunca perdió el conocimiento.
Me fijé a mi alrededor y me di cuenta de que no había dientes y no había sentido ningún tipo de dolor en realidad. Cuando supe dónde estaba, solo pude decir: ‘Oh, Dios mío, estoy en la boca de una ballena. Estoy en la boca de una ballena y está intentando tragarme’.
Lo escupió… porque no tenía un buen sabor
Según Packard, el animal emergió a la superficie y comenzó a sacudir la cabeza, luego salió volando por el aire y cayó nuevamente en el agua. Ya era libre y estaba flotando. Simplemente no lo podía creer.
El afortunado buzo fue rescatado del agua por un compañero de su equipo, quien después lo llevó al hospital. Afortunadamente, Packard no tuvo más que algunos moretones y el incidente no terminó en una terrible tragedia.