Kampung Pelangi es un pequeño pueblo ubicado en Randusari, Indonesia, que ha decidido detonar el turismo en la zona. El gobierno local invirtió 23 mil dólares en la campaña de posicionamiento que cambió el nombre del otrora pueblo grisaceo de Kampung Wonosari al de “Aldea del Arcoiris” (Kampung Pelangi) y adornó con colores cada espacio de la ciudad.
El pueblo está llamando la atención con sus 223 casas que muestran en sus fachadas tonos arcoíris e imágenes de globos, amigables monstruos o dibujos geométricos de mil formas.
Esfuerzo de la comunidad
Para lograr el efecto, cada edificación se pintó de tres o más colores, desde techos hasta puertas y ventanas, y a los espacios públicos y mobiliario urbano también se le dio el tratamiento arcoíris.
La transformación corrió a cargo de la comunidad, en conjunto con la Asociación de Constructores de Indonesia y el alcalde de Semarang.
Resultados inmediatos
La iniciativa ha repercutido de manera positiva en la economía local y en los pequeños negocios de los habitantes.
Los turistas han llegado y sus fotos están inundando las redes, especialmente Instagram.
Los sitios especializados en viajes a Indonesia ya integraron en sus catálogos a este peculiar y colorido poblado.
Y cada espacio se ha convertido en un lienzo en blanco para artistas y jóvenes creadores.
Lo que sigue
Solo el suelo de las calles permanece gris y el gobierno local está considerando invertir para pintar el resto de las casas y limpiar el río que cruza la villa.