A menos de que seas hija única (y lo sentimos por ti), seguramente sabes que pelear con tus hermanos es parte de la vida, pasas tanto tiempo con ellos y saben tanto de ti (por eso no les debes hacer enojar tanto) que es imposible no discutir algunas veces (pocas, obviamente, porque como dirían las mamás: “los hermanos no pelean, se aman”). Y aunque tus papás trataban de impedirlo y mediar la situación antes de que estallara la Tercera Guerra Mundial en la sala, la ciencia dice que esa rivalidad fue bastante buena para ti.
Así es, un poco de tensión familiar siempre es buena y de acuerdo con un estudio de la Universidad de Cambridge, la rivalidad entre hermanos impulsa el desarrollo mental y emocional, incrementa la madurez y mejora las habilidades sociales.
Pelear con tus hermanos es el entrenamiento perfecto
De acuerdo con la psicóloga infantil Linda Blair, las peleas entre hermanos son “el entrenamiento perfecto, de aquí aprenden a obtener lo que quieren de forma diplomática y a la vez salirse con la suya, pero considerando la aprobación de las personas que más les importan en este mundo: sus padres”.
Es aquí cuando los padres fomentan los valores como la generosidad, empatía, tolerancia y honestidad, dando como resultado un entrenamiento de valores intensivo que será aplicado en el futuro con amigos, compañeros de colegio y trabajo.
Adquieres habilidades para tu vida diaria
La educadora infantil Signe Whitson aseguró que los hermanos que se pelean “dominan todo tipo de habilidades que pueden servirles a lo largo de su vida y, en el mejor de los casos, en sus relaciones personales”.
También dice que durante sus batallas los más pequeños aprenden a resolver problemas y conflictos. Practican el autocontrol hasta el punto en que consiguen no enfadarse por cosas insignificantes; esto a largo plazo les ayudará a controlar sus impulsos agresivos y comunicarse de forma inteligente.
Por último, la educadora afirma que cuando los hermanos hablan entre ellos de sus problemas aprenden a escuchar y a desarrollar empatía por el otro.
En ellos encuentras a tus mejores amigos
Además de que las peleas pueden traer consigo enseñanzas importantes, también unen más a los hermanos. Blair afirma que la intensidad de las peleas definirá el tipo de relación que tendrán los hermanos en el futuro.
Victor Cicirelli, otro psicólogo que dedicó su vida a estudiar la relación entre hermanos, dijo que a partir de los 60 años los hermanos se convierten en las personas más importantes en nuestras vidas.