Bien dicen que las mujeres jamás estaremos conformes con lo que la naturaleza nos dio, y uno de los ejemplos más claros es cuando se trata del cabello. Si vemos a una chica con una impresionante cabellera lacia, más de cuatro lanzamos una mirada entre admiración y envidia cuando se mueve al viento en cada paso que da, y mataríamos por saber cómo tiene ese peso y brillo.
La verdad es que tener el cabello muy lacio no es tan glamoroso como parece, y a pesar de que todo mundo cree que es el tipo de cabello de más fácil mantenimiento, también hay días en que quienes lo tienen de esta forma quisieran raparlo. Si eres una de estas chicas, seguro entenderás cada una de estas situaciones.
1. Nunca tendrás un rizo
Y por nunca me refiero a jamás. Puede ser que con ayuda de una pinza logres un intento, pero en el mejor de los casos te durará unos cuantos minutos.
2. Siempre te ves igual
Realmente son muy pocas las variantes de peinados que puedes hacer y las únicas decisiones que puedes tomar son el largo y el estilo, pero fuera de eso no hay mucho que hacer.
3. Si lo tienes delgado, no hay nada que hacer
Es tan lacio que para verte peinada solo lo lavas, lo dejas secar al natural y listo.
4. Pero si es grueso, estás en problemas
Es como si tuviera vida propia y se convierte en un ente totalmente fuera de control.
5. Encontraste otro uso para el cepillo de dientes
No hay manera de que llegues a mediodía sin parecer un sol radiante con tantos cabellos saliendo por toda tu cabeza, y debes recurrir al viejo truco del cepillo de dientes y el gel para aplacarlos aunque sea un poco.
6. El maldito frizz
Eres una carga eléctrica viviente: tu cabello siempre tiene estática y entre eso y los pelitos nacientes hacen parecer que siempre tienes los pelos de punta.
7. Se hace grasoso
Otro dato para quienes creen que tener el cabello lacio es todo risas y alegría. Como no tienes volumen y es probable que lo toques mucho, tu cabello se hace grasoso casi de inmediato.
8. Los pasadores y tú no son amigos
Has probado todas las técnicas para colocarlos y nunca jamás uno de ellos ha permanecido más de cinco minutos en su lugar.
9. Y las marcas de las ligas
Una vez que lo sujetas, nunca vuelve a su estado original. Nunca.
10. Tienes una fortuna invertida en productos
Ceras, aceites, spray, geles, lo que sea por un poco de volumen.
11. Cortarlo no siempre es la solución
Si crees que con tenerlo corto resolviste tu vida, estás en un error. Siempre se necesita algún producto para mantenerlo en su lugar o de lo contrario lucirás como si te hubiera caído un balde de agua encima.
12. La gente te dice que no tienes nada de qué quejarte
No te quejas, pero simplemente no lo entienden.
13. Pero cuando un producto llega a funcionar, eres la reina
Y nadie te quita la sonrisa del rostro.
14. Ni soñar con un bum o peinado recogido
Porque simplemente no va a suceder.
15. Pero pierdes mucho cabello
Es tan delgado que no permanece en su lugar y a veces crees que hay más en el cepillo o en la regadera que en tu cabeza. Y es triste.