Todos creen que las mujeres somos dramáticas y sentimentales por naturaleza, pero no es así. Aún existimos algunas chicas que odiamos todas esos estereotipos que definen a las mujeres. No, no estamos amargadas y no quiere decir que no tengamos corazón, simplemente preferimos no complicarnos la existencia.
Si tú eres una chica que prefiere no abrir su corazón, olvidarse del drama, no demostrar sus sentimientos ni expresar sus emociones, entonces te sentirás identificada con estas cosas que les suceden a las chicas ‘sin sentimientos’.
1. No sufrimos a la hora de terminar una relación
Tal vez suena cruel, pero preferimos terminar con algo que soportar peleas, dramas, infidelidades o incluso hasta aburrimiento. Nosotras no lo pensamos dos veces, si algo no cumple con nuestras expectativas, le decimos adiós sin el mayor problema. No quiere decir que no amemos, o que no nos duela terminar la relación, simplemente entendemos que es lo mejor.
2. Lo que más disfrutamos de graduarnos es no volver a ver a nuestros compañeros
Más que sentirme orgullosa por haber concluido una etapa, me sentía feliz porque jamás tendría que volver a convivir con esas 10 odiosas personas que llamaba compañeros. Claro que algunas personas las extrañaré de vez en cuando, pero esa felicidad de no verlos tan seguido no se compara con nada.
3. Odiamos a la mayoría de las personas
Bueno, en realidad no las odiamos, solamente no las toleramos. Nos molestan las personas que caminan lento en la calle, los niños, las señoras metiche, la gente que habla en el cine, las personas de la fila del banco, el taxista platicador, a los adolescentes, a los maestros, y a la gran mayoría de personas que conocemos.
4. Te vuelven loca las chicas que lloran por todo
Jamás podrás entender cómo una chica es capaz de llorar en público. No es que no tengas sentimientos, sólo sabes que algunas cosas son mejor hacerlas a puerta cerrada. Ver a una chica llorar desesperadamente frente a todos porque su novio le fue infiel, es algo que hace explotar tu cabeza en mil pedazos.
5. Tenemos la capacidad de reírnos de nosotras mismas
Sinceramente esto es algo que no todos pueden hacer. Si atravesamos por alguna situación difícil, nos sucede algo vergonzoso o algo complicado, nosotras siempre tratamos de encontrarle el lado más gracioso y burlarnos de ello.
6. No tenemos problemas en eliminar amigos de nuestra vida
Mucho menos de redes sociales. Hay personas en Facebook o Twitter que se la pasan publicando puras cosas que te sacan de quicio, así que prefieres eliminarlas a seguir aguantando tonterías. No te pones sentimental ni te preocupa el qué dirá, simplemente lo eliminas y listo.
7. Somos las peores consejeras
No es que nuestros consejos sean malos del todo, simplemente son muy sinceros y no todas las personas están preparadas para escuchar la verdad. Cuando alguien pide un consejo, con frecuencia esperan escuchar lo que esa persona quiere oír, claro que contigo no es así, tú le dirás lo que piensas sin miedo a que se ofenda.
8. Tenemos un sentido del humor negro
La mayoría de las personas no entienden nuestro humor ácido. Ellas se ríen con los chistes bobos de comediantes que salen en la televisión, nosotras necesitamos algo más ‘cruel’ para poder morir de la risa. Somos un poco sarcásticas y pocas personas son capaces de entender y aguantar nuestro sentido del humor.
9. La mayoría de la gente piensa que estamos amargadas y somos antisociales
No, no estamos amargadas, sólo creemos que es mejor estar solas que mal acompañadas.
10. Somos poco tolerantes
Explotamos muy fácil. No nos gusta el drama, pero eso no significa que dejemos que abusen de nosotras. Si nos dan un mal servicio, si alguien intenta hablar mal de nosotras o simplemente ocurre algo que nos molesta, explotaremos y diremos todo lo que pensamos respecto a la situación.
11. Odiamos depender de otros
Sabemos trabajar en equipo, pero sólo cuando nosotras tenemos las riendas del equipo. Es muy estresante tener que depender de otros, sobre todo cuando los otros no ponen de su parte para sacar el trabajo adelante.
12. Perdonamos pero no olvidamos
Cuando una persona nos falla nos cuesta trabajo perdonar. Tal vez lo hagamos, pero sólo para no cargar con ese peso. Nunca olvidaremos lo que pasó y eso nos hará alejarnos de la persona que nos falló, y tal vez para siempre.
13. No soportamos a las personas que sólo buscan llamar la atención
Hay personas que hacen cosas sólo para que la demás gente voltee a verlas. Nosotras no toleramos eso, cuando nos enfrentamos con una persona así lo primero que queremos hacer es aventarle el objeto más pesado en la cabeza para que deje de hacerlo.
14. La gente piensa que no tenemos corazón
Claro que lo tenemos y claro que hay cientos de cosas que nos conmueven, pero no lo gritaremos a los cuatro vientos porque no tiene caso. Con que nosotras sepamos lo que pasa en nuestra mente y corazón es suficiente.
15. Lo mejor que nos puede pasar es encontrar a alguien como nosotras
Saber que no estamos solas y que hay más personas con quienes podemos compartir nuestro odio por el mundo ¡es genial!