Convertirse en la musa de uno de los mejores fotógrafos a nivel mundial fue tarea sencilla para la hermosa Julianne Moore, quien inspiró a Peter Lindbergh a recrear diferentes obras creadas por los grandes maestros del arte, pero con el toque de las marcas más importantes de la moda.
Dior, Calvin Klein, Louis Vuitton, Armani Prive, entre otros, fueron los encargados de diseñar los atuendos. Estas nuevas versiones tienen el toque fashionista ideal para que la famosa actriz pudiera representar las famosas pinturas. Estilistas, maquillistas, directores de arte, entre otros, estuvieron involucrados en la creación de estas fascinantes fotografías hechas para la revista Harper’s Bazaar.