Estas suculentas se ven exactamente como pequeños conejos saliendo de sus madrigueras. Su nombre real es Monilaria obconica, y aunque tienen un aspecto lindo, con el tiempo las “orejas” van creciendo y pierden la adorable forma que una vez tuvieron.
Crecen en colinas sudafricanas y necesitan de un clima seco, por lo que no será necesario regarlas cada tercer día como al resto de tus plantas. Son perfectas para decorar tu depa o tu escritorio.