Demi Lovato estuvo sobria seis años hasta que recayó con una sobredosis que casi le cuesta la vida. Estuvo internada en un centro de rehabilitación y salud mental donde determinaron que tendría que moderar su contacto social e incluso se le prohibieron ciertas relaciones.
Aunque lo principal para superar su adicción es admitir su responsabilidad, no hay duda de que las malas influencias también fueron parte de su recaída y, por tanto, hay que eliminarlas. Por ello le fue prohibido hablar con algunos amigos, incluso con un tío lejano que -se sabe- le proporcionaba drogas.
Lovato salió hace unas semanas de rehabilitación y se le ha visto retomando su vida normal. Pero Internet no perdona ni olvida, y lo demostró al criticarla por ser captada usando su celular: “está a solo un tuit de conseguir droga nuevamente”. No obstante, ella ha demostrado todo lo contrario.
Fuentes cercanas a Entertainment Tonight dijeron que ella está alejándose de las relaciones y amistades complicadas, pues quiere estar rodeada solo de buenas vibras. Con base en esto, Lovato considera que Selena Gomez y Nick Jonas son personas muy complicadas, y dejó de seguirlos en su cuenta de Instagram, a pesar de que fueron íntimos amigos.
Ella necesita de quienes apoyen sus metas y alejarse de la negatividad. Demi ha sobrepasado un gran camino. Está más madura y fuerte emocionalmente luego de este proceso. Se dio cuenta de que no hay cómo arreglar esto de forma rápida y ha aceptado que necesita tomarse el día a día. Aún tiene compañía para mantenerse sobria y ha construido un grupo de apoyo muy grande.
En Internet se especula que Selena y Nick representan un pasado doloroso para Lovato: la época en que sus adicciones comenzaron, justo cuando estaba filmando Camp Rock.
Lo que sí es un hecho es que estos 90 días de rehabilitación cambiaron su vida por completo. Ahora solo quiere mantenerse fuera del centro de rehabilitación y para ello está dispuesta a todo, incluso a eliminar amistades del pasado.