Christyine Jiaxin Lee es una joven de 21 años que por cuestiones del destino revisó un día su cuenta bancaria y se encontró con la sorpresa de que le habían depositado por error 4.6 millones de dólares; sin embargo, esta chica reaccionó de la manera más natural y gastó hasta el último centavo en grandes lujos como una inmensa lista de bolsas de mano de lujo, las cuales por poco y le cuestan su libertad.
Al intentar salir de Sydney, Australia, y después de ser investigada por este error, la chica fue detenida en el aeropuerto y fue interrogada por la policía, quien revisó sus cuentas del banco; sin embargo, lo más sorprendente de este “golpe de suerte” es que un ministro de la corte aseguró que la joven estudiante de ingeniería química no cometió ningún delito, ya que “ella no robó nada, el dinero llegó sólo a su cuenta”.
Un empleado del banco transfirió por error 4.5 millones de dólares a su cuenta
Christine Lee abrió una cuenta de banco un mes después de su cumpleaños número 18, en agosto del 2012; pero un empleado de la compañía bancaria australiana Westpac, accidentalmente transfirió la cantidad de 4.5 millones de dólares a su cuenta, convirtiéndola en la chica con más suerte del mundo…
O al menos hasta que le duró la fortuna, ya que entre julio de 2014 y abril del 2015 había gastado la mayor parte del dinero en viajes, cenas en restaurantes de lujo y sobre todo bolsas de mano; hermosas, costosas y tentadoras bolsas de mano.
Tuvo acceso a lujos como este cojín Chanel, de 1,350 dólares
O este brazalete Cartier, de 9,000 dólares
Y la exageración: esta bolsa Hermes de 158,225 dólares
Ok, esta chica pudo comprarse un coche o una casa; sin embargo gastó casi 160 mil dólares en este Hermes Birkin de piel de cocodrilo Himalaya.
Hasta que 4 años después, el banco la descubrió
El fiscal Marc Truner, quien llevará el caso, intentó comunicarse con esta chica mediante llamadas que ella jamás regresó, así como numerosos correos electrónicos que nunca contestó. Y tras ser detenida en el aeropuerto de Sydney, se le impuso una fianza de 900 euros que el novio tuvo que pagar para dejarla libre.
El fiscal la acusó de delitos como apropiación indebida, fraude e incumplimientos con las disposiciones de su visa de estudiante; ya que esta chica es originaria de Malasia, pero residente en Australia por cuestiones de estudios.
Lo más increíble es que tal vez la chica no cometió un delito
“Me cuestiono si el uso que le dio al dinero esta chica de 21 años fue un acto criminal, siendo que el error fue del banco, y ella solamente tomó ventaja de eso. Realmente no procede como delito, sólo es una cantidad de dinero con la que todos soñamos y ya”.
Lo más sorprendente de esta historia es que Lisa Stapleton, ministro de la corte, asegura que la chica no cometió delito alguno, y que será muy difícil que pueda proceder como crimen el hecho de que una chica de 21 años tuviera dinero en su cuenta de banco y decidiera gastarlo “inocentemente”, ya que el dinero no fue adquirido de manera ilegal.