En un par de semanas se cumplirán dos años desde que inició la primera cuarentena por la pandemia de covid-19. Desde marzo de 2020, el mundo cambió de manera radical y tuvimos que acostumbrarnos a nuevas reglas y recomendaciones para mantenernos a salvo, tanto a nosotros como a las personas que nos rodean.
Una de las nuevas costumbres es el uso de cubrebocas todo el día, todos los días, ya que este disminuye de manera importante la posibilidad de contraer, y de contagiar, la enfermedad. A pesar de que al inicio muchas personas batallaron para acostumbrarse, dos años después ya se convirtió en algo muy cotidiano. Y te tenemos buenas noticias, pues parece ser que usar cubrebocas hace que la gente se vea más atractiva.
Un estudio realizado por la Universidad de Cardiff, en el Reino Unido, afirma que puede haber una relación directa entre el uso de cubrebocas y qué tan atractiva te encuentren otras personas. El estudio se llama Beyond the Beauty of Occlusion: Medical Masks Increase Facial Attractiveness More Than Other Face Coverings (“Más allá de la belleza de la oclusión: la mascarilla quirúrgica eleva el atractivo facial más que otras cubiertas faciales”) y los resultados son muy reveladores.
Anteriormente se creía que el uso de una mascarilla quirúrgica disminuía el atractivo de una persona debido a que, de manera inconsciente, lo relacionábamos con mala salud. Sin embargo, parece ser que estos dos años han cambiado la manera en la que vemos las cosas.
¿En qué consistió el estudio?
Se le pidió a un grupo de 43 mujeres que calificara el atractivo de varios hombres en cuatro situaciones diferentes: con la cara descubierta, con media cara cubierta por un libro, usando cubrebocas de tela y usando cubrebocas de tipo quirúrgico. Sorprendentemente, las mujeres encontraban a los mismos hombres más atractivos cuando traían puesta una mascarilla quirúrgica.
A pesar de que inicialmente podríamos creer que esto se debe a que el cubrebocas puede ocultar imperfecciones como acné y cicatrices, los investigadores llegaron a otra conclusión y sugieren que se debe a una cuestión más bien social, en la que asociamos el uso de cubrebocas con el personal médico.
¿Por qué ocurre esto?
La ventaja de un cubrebocas de tela se puede atribuir al efecto de oclusión, pero el efecto de la mascarilla quirúrgica va más allá de ocultar las características indeseables. Es posible que la ventaja adicional de las mascarillas médicas provenga de sus asociaciones con profesionales médicos.
Estos hallazgos sí que son sorprendentes, sobre todo porque anteriormente el uso de cubrebocas disminuía el atractivo de las personas. No cabe duda de que la pandemia ha cambiado muchísimos aspectos de nuestra vida y lo que antes era visto como anormal e incluso indeseable, hoy es lo más cotidiano del mundo.