Si quieres darle un giro a tu melena, pero no te arriesgas a teñirla ni cortarla por completo, entonces tu mejor opción es agregarle un flequillo, pues este te aportará un toque de frescura, juventud y energía. Además, cuidarlo y peinarlo no requiere de tanto esfuerzo, aunque sí de paciencia.
Trata de que tu flequillo se adapte a la forma de tu cara, así tendrás un resultado tan lindo que querrás intentarlo una y otra vez. Para ello te compartimos una pequeña guía para saber cómo cortar tu fleco y no fallar en el intento. Al menos que seas una profesional, evita hacerlo tú misma y mejor acude con tu estilista de cabecera.
Rostro corazón
Elige flecos hacia un lado. Trázalos desde atrás hasta adelante, pero cuida que caigan en dirección a tu rostro para que la frente se vea menos amplia.
Rostro rectangular
Opta por un fleco recto, pues este te ayudará a acortar el largo de tu rostro. También puedes elegir un flequillo de lado. Recuerda evitar a toda costa los flecos cortos.
Rostro ovalado
Si tienes este tipo de rostro, tienes la suerte de elegir casi cualquier tipo de fleco. Sin embargo, deberás evitar aquellos que sean muy cortos y con volumen, ya que estos aumentan el largo de tu cara.
Rostro redondo
Lleva un fleco corto en el centro, largo en los costados y con poco degrafilado para resaltar tus facciones.
Rostro cuadrado
Opta por un fleco estilo Bardot, que está dividido y en el centro es más corto que en los lados, o bien, por uno largo, de lado y asimétrico. Estos te ayudarán a suavizar tus facciones.