La naturaleza es muy sabia y una verdadera artista, pues les dio a algunos animales e insectos una coloración críptica que les permite confundirse con el entorno para poder cazar y, en el mejor de los casos, escapar de sus depredadores.
Sin embargo, estos animales, cosas y una que otra persona demostraron que también pueden mimetizarse con su entorno, al grado de casi volverse invisibles. Su camuflaje es increíble pero también es como un pequeño fallo en la Matrix.