Una de las acciones que se han vuelto tendencia entre los creadores de contenido en redes sociales es la intención de regalar dinero a personas desconocidas que van caminando por la calle o de hacer buenas acciones con el fin de ver su reacción y ayudar a quien quizá se encuentra con problemas económicos.
Siguiendo esa tendencia, esta influencer intentó llevar a cabo la actividad de pagar el mandado de las personas en un supermercado, pero se llevó la sorpresa de que nadie aceptó su ayuda y terminó llorando por el rechazo. Su anécdota se volvió viral, ya que fue muy criticada porque aseguraron que solo quería ganar fama.
La tiktoker en cuestión es Amelia Goldsmith, una joven atleta que, siguiendo la inquietud de ayudar a personas con sus compras, compartió un video en su perfil mostrando su iniciativa, que no tuvo el resultado que esperaba, ya que al ofrecerle a las personas pagar su despensa, estas se negaban a aceptar su ayuda y pagaban ellas mismas.
En la grabación se puede ver a la influencer llegar a un supermercado, donde al intentar realizar su obra de caridad, se acerca a un hombre y le ofrece pagar su cuenta, pero este la rechaza de inmediato y continúa con sus compras. Amelia siguió insistiendo hasta el hombre se mostró algo molesto y a ella no le quedó más que alejarse del lugar.
https://youtu.be/UhJZo253rbg
Esperaba que la persona estuviera como, ya sabes, encantada y agradecida de que pagara sus compras. Pero, obviamente, no salió bien; él estaba un poco enojado… La segunda persona me miró como idiota, no debería decir nada, pero ella estaba como ‘no, no, no’.
Manifestando que se encontraba nerviosa por la acción e incluso que llegó a sentir pánico por ser rechazada en varios intentos fallidos por pagar la cuenta de algunas personas en el centro comercial, al final, la chica se dio por vencida y terminó pagando su propia cuenta al comprar algunas latas de jugo de tomate, pasta y algunos otros artículos.
Antes de finalizar la grabación, Amelia confesó que los artículos que compró los dejó en la caja de donaciones y optó por irse del lugar, no sin antes mostrarse decepcionada y frustrada por haber sido rechazada por las personas que, sin querer, la hicieron sentir como un “bicho raro”, razón por la que no pudo evitar derramar algunas lágrimas.
Su video no pasó desapercibido y se volvió viral en la plataforma de videos cortos, donde recibió diversas críticas porque “simplemente buscaba darse fama”, ya que muchos aseguraron que no es necesario dejar evidencia en video cuando se quiere hacer una buena acción. Mientras otros cuantos la felicitaron por la iniciativa de ayuda y que, al final, esos alimentos serán aprovechados por alguien que en realidad los necesite.