Las personas que no consumen habitualmente videos en la famosa plataforma de TikTok, quizá no estén enterados de que no todo son bailes y risas, sino que esta red social también se presta para temas serios. Por ejemplo, puedes encontrar cuentas de divulgación científica, usuarios que dedican su contenido a compartir sus sentimientos y, en general, un sinfín de temas alejados de la perfección que otras redes ofrecen.
Un caso reciente de este tipo fue el de la usuaria Sol Díaz Villarreal que, a través de su cuenta (@marisol.ydv), compartió el indignante hecho al que fue sometida por parte de una docente de la escuela de medicina en la que estudia. Acompañado del significativo texto “Un poquito más de empatía no hubiera estado mal”, la joven subió el video donde se le puede ver llorando y mostrando unas diapositivas desde su computadora.
Además, otro contundente mensaje acompaña el clip, mismo que ya cuenta con casi dos millones de reproducciones y más de dos mil comentarios. En este, Sol expone brevemente la situación y el por qué de su llanto.
Acabas de enterrar a tu abue, pero la doctora dijo que si no exponías al día siguiente no te podía calificar.
@sol.ydv Un poquito más de empatía no hubiera estado mal
De esta forma y sin necesidad de mayor explicación, la estudiante de medicina se ganó la empatía que la maestra no pudo darle en la sección de comentarios. Lamentablemente, esta situación es bastante común en los recintos estudiantiles, en donde las autoridades educativas abusan de un poder imaginario que ellos mismos se conceden habitualmente.
‘Me dijeron que igual entregara la maqueta en ‘honor a mi mamá’ y yo solo quería llorar mientras trataba de procesar lo que acababa de pasar’; ‘Me pasó algo similar. En mi último examen del semestre, la maestra no me dejó faltar para ir al entierro de mi abuelito, hice el examen lo más rápido y no alcancé a llegar’; ‘Cuando mi abuela estaba muriendo en el hospital pedí permiso para poder viajar hasta donde ella estaba. La de RR. HH.: ‘¿para qué vas? Ya va a morir’.
La grabación se hizo bastante viral, precisamente por esa cualidad empática que bastante falta hace en los centros educativos y laborales. Con esto se espera que casos como el de Marisol dejen de ocurrir, ya que mientras más resuenen en Internet y otros espacios mediáticos, es más probable que lleguen a los oídos correctos.
