Los más recientes atuendos de Ezra Miller en la gira de promoción de Animales fantásticos: los crímenes de Grindewald son la prueba de que el arte, la moda y las alfombras rojas pueden hacer sinergia, y de paso volverse la mejor estrategia de propaganda para llamar la atención de todos en Internet.
¿Por qué elegir un traje sastre aburrido de Armani cuando puedes vestir algo de Pier Paolo Piccioli? El italiano fue el diseñador encargado de vestir a Ezra con un especie de hábito puff, original de su colección Genius, inspirada en el Renacimiento.
La habilidad de Ezra materializando fantasías de indumentaria, portando diseños extravagantes y llenos de simbolismo, como los de Piccioli, o su fascinación con el maquillaje, hacen que el actor no solo se reconozca como andrógino, sino también como pequeño rey de la moda masculina en potencia.
Otro de los looks que usó Ezra para la promoción de la película fue una capa de plumas blancas de la marca Givenchy, maquillaje metálico y una pose a la que se negó cambiar durante toda la alfombra roja: sus manos abiertas hacia abajo y la palabra Avada Kadevra en forma de triángulo invertido, en sus palmas.
Avada Kadevra es una de las maldiciones imperdonables en el mundo de la magia ya que al hacer efecto le arrebata la vida a quien se dirija el conjuro. La nueva imagen de Cardence Barebone, personaje de Ezra, representa esa pelea con él mismo, al sentirse dividido entre el bien y el mal.
En la primera película de Animales fantásticos, Barebone fue tentando por Grindelwald (Johny Depp) para unirse a él y utilizar sus increíbles dones mágicos, pero esta vez con el fin de hacer el mal. Es por esto que, sin salir del personaje, Ezra proyecta una dualidad entre las alas de ángel y los Avada Kadevra, representando la “sangre” inocente en sus manos y que nunca podrá borrar.
En entrevistas recientes, Ezra declaró que la gente “mala o buena” realmente no existe, lo que da sentido para que su personaje viva confundido entre hacer el bien o el mal:
No creo en esa gente. Esa es la diferencia entre el universo de Rowling y otros universos de ficción que realmente intentan trazar líneas entre buenos y malos; héroes y villanos.
En estas historias hay fantásticos antagonistas, pero eso no significa que no busquemos entender a todos los seres humanos antes de ponerles etiquetas o títulos como ‘bueno’ o ‘malvado’.
Esta forma del actor de analizar los personajes puede ser reflejo también de su visión del mundo y cómo él entiende lo que se puede catalogar como “correcto” o “incorrecto”; un ejemplo de ello es su repetido coqueteo con la moda femenina. En numerosas ocasiones el actor posa para revistas o llega a eventos con labial y rubor, e incluso usando faldas y medias.
Otro conjunto extravagante, pero quizá más divertido, fue el que usó para la promoción de la película durante la convención de historietas Comic-Con en San Diego, cuando se presentó disfrazado de Toadette, el famoso honguito de Mario Bros., pero eso sí, con con lencería fina y enseñando pierna con liguero.
Puede que Ezra utilice la moda para travestir su imagen y expresar su personalidad a través de ella, mientras que de paso reta a los ojos conservadores del público que lo miran asombrado con un artista diferente, provocador, y sin duda inolvidable.