Muchas mujeres han sido avergonzadas por hacer lo que es natural de una madre: darle de comer a su hijo. En nuestra sociedad está mal visto que se amamante a un bebé en público e incluso se han intentando establecer leyes en contra.
Sin embargo, no siempre fue de esa forma. En el siglo XIX las personas reconocían que era algo normal e incluso hermoso el poder alimentar a sus hijos. Algunas mujeres posaron frente a las cámaras para poder capturar el hermoso momento y estos son algunos ejemplos.