Si a lo largo de tu vida te han catalogado como la chica amargada o antisocial, bienvenida al club. No te gusta el contacto físico y odias profundamente a todas esas personas que van por el mundo sonriendo a diestra y siniestra.
Te han dicho antisocial tantas veces que ha llegado el punto en el que se ha convertido en el mejor de los halagos que alguien te haya dicho, pues aunque muchos no entiendan, permanecer en tu casa viendo Netflix se ha convertido en el mejor estilo de vida que alguien pudo encontrar.
1. Jamás respondes las llamadas telefónicas
Tampoco contestas a un Whatsapp porque te da flojera escribir.
2. Haces citas, pero nunca vas
Sueles decir: “a ver cuándo nos tomamos un café”, aun sabiendo que nunca moverás un dedo para hacerlo.
3. Eres máster en cancelar planes
También sueles decir: “no puedo, estoy muy ocupada”, a un plan de viernes por la noche para quedarte en casa viendo Netflix.
4. Tu mayor alegría es…
Que los demás te cancelen el plan.
5. Has roto el récord Guinness
Pasando más de 24 horas continuas dentro de tu habitación.
6. Odias las muestras de afecto
Incluyendo los saludos con abrazo.
7. Evades a las personas
En especial si las ves por la calle y te miran fijamente con la intención de saludarte.
8. Nunca abres la puerta
O por lo menos no sin antes revisar por la ventana quién está tocando.
9. Tus audífonos se han convertido en tu protección
Finges que no has escuchado a los demás “porque estás oyendo música”.
10. Pides comida a domicilio
Has eliminado mentalmente a todos aquellos restaurantes que exigen una visita.
11. Odias las fiestas
Sobre todo porque hay que interactuar con los demás invitados.
12. Prefieres llegar tarde a socializar
Has tomado el siguiente autobús con tal de no socializar con tu compañero de trabajo al que has visto subirse antes.
13. Evitas el contacto visual
Para impedir que la otra persona suponga que eso es una invitación a charlar.
14. Prefieres los proyectos en solitario
Los trabajos en equipo se han convertido en tu peor pesadilla.
15. Nadie entiende tu forma de ser
Pero tú amas tu soledad y eso no te interesa.