Sarah Stage es una modelo de 30 años de edad que vive en Los Ángeles, California. Pero ella no es cualquier modelo, y su mayor fama la alcanzó no por su trabajo, sino por el cuerpo envidiable que lucía en su cuenta de Instagram a sus 9 meses de embarazo.
En algunas imágenes parecía que no llevaba un bebé en su vientre, todo gracias a un extenuante entrenamiento que seguía día a día para no perder la línea.
El embarazo suele transformar la figura femenina, pero en el cuerpo de Sarah estos cambios fueron mínimos.
Ella sólo ganó alrededor de 9 kilos durante todo el embarazo.
La modelo confesó que para conservar su cuerpo mantuvo una rutina de ejercicio diario “suave”, hizo pilates y llevó un régimen saludable.
Aunque –asegura– nunca se privó de cumplir sus antojos.
Sus publicaciones en redes sociales causaron gran polémica debido a que sus seguidores comentaban que su estilo de vida no era saludable para el bebé.
Sin embargo, la modelo acaba de dar a luz y demostró que su rutina no afectó en nada a su pequeño hijo, que es sano y de talla normal.
Ahora sólo queda ver cómo Sarah nos sigue sorprendiendo.