Por increíble que parezca, en pleno siglo XXI siguen existiendo prejuicios sobre el periodo femenino. Uno de los casos más recientes se dio en los Estados Unidos, en donde una mujer fue cesada de sus labores por tener un par de accidentes.
Alisha Coleman habita en Fort Benning, Georgia; trabajó por diez años en el Instituto Bobby Dodd, organismo dedicado a ayudar a encontrar empleo a personas con discapacidad, y nunca imaginó que pudiera ser despedida de su empleo en 2016 por haberse manchado.
No se quedó callada
Luego del suceso, Coleman decidió entablar una demanda en contra de sus empleadores y actualmente es apoyada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU por sus siglas en ingles) de Georgia y su colega Buckley Beal.
Ser despedida por una fuga accidental fue muy humillante. No quiero que ninguna mujer tenga que pasar por lo mismo que yo, por eso estoy luchando.
Y no está sola
En un comunicado, Andrea Young, directora ejecutiva de la ACLU de Georgia, dijo que:
Los empleadores no tienen porque estar vigilando el cuerpo de las mujeres o sus ciclos menstruales… Despedir a una mujer porque llegue su periodo mientras está en el trabajo es algo ofensivo y un insulto a todas las mujeres. Un periodo es algo pesado y la mayoría de las mujeres tiene un flujo abundante, especialmente cuando se acercan a la menopausia. Alisha fue avergonzada, humillada y despedida por ello. Eso es incorrecto e ilegal de acuerdo a la ley federal. Estamos luchando juntos.
Seguirá luchando por el bien de las mujeres
En febrero, el caso fue desestimado por un tribunal de distrito, pero la ACLU decidió presentar una apelación ante la corte, argumentando que el tribunal se equivocó al desestimar que el periodo y la premenopausia no están amparados bajo la ley, en virtud del Título VII de la Ley de Derechos Civiles, que prohíbe la discriminación en el lugar de trabajo basada en el embarazo, dar a luz o alguna condición médica relacionada con estas condiciones.
Alisha alega que en 2015 tuvo un accidente cuando manchó su silla, en aquel entonces, recibió una advertencia de que sería despedida si volviera a ocurrir algo similar. Sin embargo, tuvo otro pequeño incidente en abril de 2016 de camino al baño, fue entonces que decidieron despedirla, supuestamente por no seguir la norma de mantener una apariencia limpia mientras se encontraba en servicio.
Fue algo absurdo pero humillante
Alisha amaba su empleo porque sentía que podía ayudar a las personas, después de ser despedida declaró que todas las mujeres tienen miedo de tener los síntomas de su periodo cuando menos lo esperan, pero nunca pensó que pudiera perder su empleo por esa razón.