Los niños son traviesos por naturaleza. Es normal que tiren comida, dibujen en la pared o incluso que destruyan algún aparato electrónico por accidente, pero lo que hizo este pequeñito rebasó los límites de una travesura.
Con apenas dos años, el niño gastó más de dos mil dólares haciendo compras en internet y todo sucedió porque su mamá le prestó solo un momento el celular para jugar. Ella solo se dio cuenta hasta que comenzaron a llegar cajas con productos a la casa.
Ya es muy común que los padres les den el celular a sus hijos para entretenerlos durante un buen rato y que vean caricaturas, escuchen música o jueguen, pero Ayaan Kumar, un pequeño de solo dos años originario de Nueva Jersey, tenía algo diferente en mente. Ya que su mamá no salía a hacer el súper, él mismo le ahorró esa tarea.
Usando el celular de su mamá, el pequeño presionó todos los botones de la app de Walmart y pidió comida, bebidas, chucherías y muebles, muchos muebles. Al parecer, Kumar hizo el pedido porque su mamá ya había dejado todo en el carrito y él solo le dio clic al botón. Al estar los datos de la tarjeta predeterminados, se hicieron las compras y después de unas cuantas horas empezaron a llegar cajas y cajas por paquetería.
Kumar gastó un total de dos mil dólares en productos del supermercado y sus papás ni enterados. Lo bueno de todo es que ellos solo se rieron de lo sucedido y decidieron que se quedarían con algunas cosas, aunque otras sí las regresarán para tener un reembolso. Eso sí, aprendieron la lección a la mala y desde ahora ponen las contraseñas a sus celulares para que este tipo de incidentes no vuelva a suceder.