En una boda es imposible que alguien pueda opacar a la novia, pero eso es lo que (casi) sucedió en las nupcias de Aaisha Thomas y Eureke Jones.
Estamos acostumbradas a ver a las damas de honor usando delicados vestidos, por ello Aaisha decidió que sus acompañantes llevaran esmóquines en color azul, provocando todo tipo de reacciones al romper los típicos estereotipos de las bodas.