Todos los días circulan anécdotas de novias que pierden la cabeza con la organización de sus bodas. Entre las más famosas están las que hacen listas de regalos carísimos y las que exigen a las damas de honor vestir de una manera para que no las “opaquen”.
Pero para esta pareja de recién casados, la historia fue diferente, pues hicieron hasta lo imposible para que todos sus seres queridos asistieran a su enlace. Sin embargo, nadie llegó, así que le enviaron a cada uno de los invitados una cuenta de 240 dólares, con el fin de recuperar un poco del dinero que habían gastado.
Las bodas son eventos realmente caros, por eso los novios ahorran durante meses para tener un día grandioso. Gastan en comida, bebida, música y demás detalles para que sus invitados se sientan realmente cómodos y puedan disfrutar a su lado, pero no todos toman en cuenta esta situación.
Por desgracia, con la pandemia del coronavirus, todos los eventos tuvieron que cambiar y cada vez es más difícil realizar o asistir a uno, por eso luego de confirmar la asistencia de ciertos invitados, Doug Simmons y Dedra McGee, originarios de Chicago, Estados Unidos, enviaron la invitación, pues estaban seguros de que sus amigos y familiares irían y disfrutarían este día tan especial a su lado. Sin embargo, una vez que se llegó el momento, nadie llegó.
Ante esta situación, la pareja decidió enviarles una cuenta de 240 dólares como una “multa” por no presentarse al evento y lo acompañaron de una pequeña carta que decía:
Les enviamos esta factura porque confirmaron su asistencia a la recepción de la boda. La cantidad es el costo de sus asientos individuales. Debido a que no nos llamaron ni nos notificaron debidamente que no asistirían, esta cantidad es lo que nos debe de pagar por los asientos.
Ambos publicaron la factura en su cuenta oficial de Facebook con el hashtag #PETTYPOST y, según información de The New York Post, los internautas no dudaron en reaccionar por la situación.
El novio dijo que no lo habían hecho por el dinero, sino por no recibir un aviso de los invitados para cancelar su asistencia. Además, compartieron que estuvieron haciendo llamadas y todos aseguraron que sí estarían ahí.
Cuatro veces preguntamos: ‘¿Estás disponible para asistir? ¿Puedes venir? Y todos insistieron en que sí. Tuvimos que pagar por adelantado en Jamaica, porque ese era el destino de la boda. Nadie me dijo o me envió un mensaje, eso es todo lo que estaba pidiendo. Si me dices que no puedes hacerlo, yo hubiera entendido. Cuatro personas se convirtieron en ocho y luego en más y me lo tomé personal.
Doug y Dedra solo quieren hacerle ver a sus invitados y al resto de las personas que es importante cancelar antes de ilusionar a los novios, festejados o cualquier persona que haya gastados sus ahorros en dar una fiesta. Hasta ahora no sabemos si alguno de ellos cubrió el dinero, pero lo importante es que ya están creando conciencia de la situación.