La talla promedio de zapatos de una mujer ronda entre el número 24 y 25; aunque claro, todo depende de la estatura de la persona. Quienes tienen un pie promedio pocas veces sufren el calvario de ir a comprar zapatos, pues la mayoría de las veces es fácil encontrar esas tallas.
Las chicas que tienen un pie pequeño saben que salir de comprar a las zapaterías es toda una tortura, y casi nunca tendrán un resultado satisfactorio. Si tu pie es demasiado pequeño y siempre estás luchando contra eso, te sentirás identificada con estas cosas.
1. Tu vida se resume en: “¡pero qué pie tan pequeño!”
2. Encontrar zapatos de tu número es casi una misión imposible
A menos que los busques en la sección de niña; aunque claro, una niña jamás usará tacones. ¿O sí?
3. Amas comprar en internet porque nadie te juzga por tu talla
Además de que es más fácil encontrar zapatos de tu número, nadie te observa como un espécimen raro cuando mencionas que eres talla 22.
4. Es maravilloso usar zapatos que mantengan tus pies en su lugar
Los tenis y botas son tu calzado favorito porque las agujetas atan tus pies y los dejan sin escapatoria.
5. Tener el pie pequeño no significa que seas de estatura baja, y eso es mucho peor
Si mides 1.70 pensarán que es una broma cuando mencionas que calzas del 21.
6. Cuando ves tus huellas en la arena, parece que ha pisado un niño
7. Los calcetines y zapatos unitalla obviamente no son para ti
Siempre te quedan enormes, ¡siempre!
8. Las plantillas son como un regalo del cielo
Si no puedes conseguir unas, tu creatividad sale a volar. Sí, sí son toallas sanitarias.
9. Prefieres que te suden los pies a dejar de usar tus zapatos favoritos
No importa que esté a 45 grados centigrados, te pondrás hasta tres calcetines con tal de usar tus botas favoritas.
10. Tu dedo meñique sólo puede verse con un microscopio
11. Pintarte las uñas de tus pies es super rápido y económico
Tus dedos son tan pequeños que no necesitas ni mucho esmalte, ni mucho tiempo; sólo basta pasar rápido el pincel sobre ellos y ¡listo!