Seguir de inicio a fin una saga es hacerla parte de nuestra vida, compartir con nuestros amigos sobre ella y aficionarnos de una manera tan especial que les tomamos cariño a cada uno de los personajes que la conforman. Si alguna vez lo has hecho sabes a que me refiero, y muchas lo vivimos con Harry Potter, ya que cada aventura vivida nos acompañó durante nuestra adolescencia.
Así pues, si ya recordaste a cada uno de sus personajes deseamos decirte las razones por las que Severus Snape es, sin duda alguna, uno de los más excepcionales y memorables personajes que pudo haber tenido esta historia, ya que detrás de una actitud fría y calculadora estaba un corazón cálido y protector.
1. Era honesto aunque eso le costara amistades
A diferencia de muchas personas e inclusive de otros personajes de la saga, Snape siempre dijo lo que pensaba acerca de la situación a la que se enfrentaba. No daba rodeos a sus palabras, por lo que sonaba muy rudo y en ocasiones grosero, pero prefería perder amigos y estar solo a ser una persona hipócrita y condescendiente con los demás.
2. Del odio al amor hay solo un paso
El desarrollo del personaje de Severus Snape nos hizo primero odiarlo con toda nuestra alma, pues había motivos de sobra para ello, pero conforme la saga fue avanzando nuestra opinión acerca de él cambió por completo, por lo que terminamos amándolo sin más.
3. Detrás de esa coraza había un noble corazón
Es el vivo ejemplo de una persona a quien no le gusta demostrar sus emociones, pero detrás de todo existe un Snape sensible y que nos enseñó que serlo de vez en cuando no nos hace personas débiles.
4. El más valiente y leal que pudo existir
Aunque al verlo tuvieras una primera impresión de que se trataba de alguien sin escrúpulos y a quien no le importaba nadie más que él, hizo todo lo que estaba en sus manos para demostrar su valentía y serle fiel a los suyos, desde el inicio y hasta el final de su vida.
5. Siempre cumplió sus promesas
¿Recuerdas que Dumbledore le pidió matarlo? Pues aunque no fuera algo que después lo hiciera sentirse orgulloso y que además le costó aún más el odio de muchas otras personas, cumplió lo que el director de Hogwarts le solicitó, y a pesar de que Albus ya no se encontrara ahí continuó ayudando a Harry.
6. No le importaba lo que pensaran de él
Actuaba y decía lo que a él le parecía bien. Era sin duda una persona sin filtros a quien le despreocupaba lo que llegaran a pensar los demás acerca de sí mismo,, y esto es algo que todas debemos aprender.
7. Bastante inteligente y analítico
Un hombre con una inteligencia asombrosa, cuando los demás creían que nadie veía lo que hacían, ahí estaba Snape, analizando y siempre un paso adelante en el juego, dispuesto a hacer lo necesario para tener todo en orden y sin levantar sospechas.
8. Sin su ayuda Harry no habría logrado tanto
Aunque en un inicio no lo creíamos, al final de la saga lo comprendimos, y la realidad era que Harry no habría logrado mucho e inclusive habría muerto en el primer partido de Quidditch de no ser por la ayuda de Severus, al igual que en el bosque, cuando el patronus del profesor lo guió al lago congelado donde se encontraba la espada de Godric Gryffindor.
9. De una personalidad definida
Con enigmas, secretos y una forma de ser bastante diferente a la de las personas comunes, Severus sabía mantenerse como un hombre único e inquebrantable acerca de sus creencias y gustos, cosa que definía y defendía su personalidad como cualquier otra persona debería de hacer.
10. Tenía un estilo bastante único
Diferente y con mucho estilo, Severus jamás se mostró con prendas o accesorios que salieran de su clásica capa negra que agitaba y le daba un toque de rey de la noche y oscuridad cuando caminaba por los pasillos. Y es que a pesar de que a muchos no les gustaba su apariencia, él estaba más que feliz con ella y lo demostraba.
11. Su corazón solo le perteneció a una sola persona
Fue como un cisne, durante toda su vida solo amó a una mujer, quien a pesar de no corresponder su amor y casarse con otra persona era su mejor amiga; Snape amó con locura a Lily, y aunque odiara a James y a su hijo Harry por parecerse tanto, siempre lo protegió por ser hijo de la mujer a quien siempre quiso.
12. Su inteligencia emocional era enorme
A pesar de que no tuvo infancia o juventud sencilla, aprendió a manejar sus emociones de manera asombrosa, por lo que le era sencillo demostrar o hablar clara y concisa a pesar de ser por dentro un mar de sentimientos diferentes.
13. Jamás usó insultos para demostrar su desprecio
Cuando solemos estar molestos o alguien no es de nuestro completo agrado nuestro lenguaje al referirnos ante la situación o las personas suele ser a base de insultos, pero Snape no hacía eso, él hablaba acerca de ellos con un lenguaje cortante, y decía las cosas simple y sencillamente como eran.
14. Decía las cosas en el momento justo
Nunca antes y tampoco después, Snape hablaba justo cuando debía hacerlo, revelaba las cosas cuando era el momento ideal, y ejemplo de ello es cuando murió y le entregó a Harry sus lágrimas para que visualizara en el Pensadero su pasado.
15. Justo, aunque cueste creerlo
A diferencia de muchos profesores (no solo de la saga, sino también de la vida real), Severus jamás tuvo favoritismo hacia sus alumnos, pues sabía que si alguno hacía algo mal debía ser castigado, pues era la forma en que se aprende como se debe actuar ante la vida.