Un grupo de mujeres mexicanas rompió el Récord Guinnes del tejido de crochet más grande del mundo en 2019 al crear una obra de arte de casi 3 mil metros de largo y que pesa más de 800 kilos.
El “Cielo tejido” es un proyecto artístico que actualmente adorna las calles de Etzatlán, Jalisco, en México, y se extiende por 11 calles. Su creación fue liderada por una mujer llamada María Concepción Sordia, mejor conocida como Paloma Ron, y su hija, Damiana Lorena Ron.
200 mujeres participaron en la creación del “Cielo tejido”, y tomó más de 24 mil horas de trabajo. Este grupo se esmeró durante 10 meses seguidos para terminar este bellísimo pabellón artesanal, cuya relevancia internacional es tal que incluso formó parte de una exposición artística en Dubái el año pasado.
Para la familia de Paloma y Damiana, tejer es parte de sus vidas. La señora Paloma siempre ha tejido bufandas y otras prendas para su familia, y cuando se dieron cuenta de que eso ya no era suficiente para ella, encontraron nuevos retos para que siguiera desarrollando su talento.
Se convirtió en más que un pasatiempo
Inicialmente, “Cielo tejido” era un simple proyecto de tejido más. Paloma y Damiana se sentaban a tejer para pasar tiempo juntas, pero con el tiempo su proyecto empezó a llamar la atención de la gente del pueblo, y su pequeño grupo comenzó a formarse. Para ellas, tejer pasó de ser un hobby a ser una terapia mediante la cual podían olvidarse de sus tristezas por un ratito.
Queríamos unir a todo el grupo para tejer, esto iba a servir para tejer lazos en la comunidad y nos uniéramos por algo tan lindo, empezamos todo para pasar el duelo de la muerte de mi papá y mi marido también, entonces nos distrajimos con eso, porque tejer es una actividad que te quita el estrés y te olvidas de tus penas. Siempre les digo: ‘ponte a tejer, te vas a sentir muy bien, piensa que todo lo que haces, ahí se va a ir tu dolor, lo vas a echar fuera’, y sí funciona, sí mejoran muchísimo cuando se ponen a tejer.
Tejieron amistades
Varias mujeres del grupo destacaron que lo más importante y lo que más valoran de la experiencia fue formar lazos con otras mujeres y haber iniciado una convivencia tan sana y bonita. En el grupo hay desde una pequeña de 8 años hasta mujeres de edad avanzada, todas unidas por el amor a tejer.
Si te quedaste con ganas de ver esta obra de arte con tus propios ojos, “Cielo tejido” estará embelleciendo las calles principales de Etzatlán hasta el 31 de mayo.