A través de una fotografía de su rostro compartida en su perfil de Instagram, la reconocida actriz estadounidense Jane Fonda, dos veces ganadora del Óscar, dio a conocer este 2 de septiembre que fue diagnosticada con linfoma no Hodgkin, un tipo de cáncer que afecta al sistema linfático y que es bastante tratable.
En su publicación, la artista de 84 años de edad anunció que el diagnóstico y la enfermedad que padece no le impedirá que siga participando en su activismo medioambiental, así como tener algunas apariciones en televisión, ya sea para brindar alguna entrevista o incluso llegar a tener cameos en algunas producciones.
Además, aseguró que el cáncer con el que fue diagnosticada es bastante tratable, ya que el 80 por ciento de las personas que lo padecen logran sobrevivir, motivo por el que se encuentra bastante positiva y optimista. Fonda confía en que al concluir el tratamiento de quimioterapias que tomará durante seis meses, logrará salir victoriosa.
La protagonista de la serie Grace and Frankie dijo que era muy afortunada y privilegiada por tener acceso al seguro médico, ya que está consciente de que casi todas las familias en Estados Unidos han tenido que enfrentarse de un modo u otro a esta dolorosa enfermedad, pero, lamentablemente, no todos tienen la fortuna de contar con atención médica o tratamiento.
Así que, mis queridos amigos, tengo algo personal que quiero compartir. Me han diagnosticado un linfoma no hodgkiniano y he empezado el tratamiento de quimioterapia. También soy afortunada porque tengo seguro médico y acceso a los mejores médicos y tratamientos.
En su publicación, Fonda también habló acerca de la importancia de hacer consciencia no solo de la falta de acceso al tratamiento de este padecimiento, sino a los productos que consumimos y los hábitos que nos provocan ser diagnosticados con cáncer.
La actriz de 84 años informó que ya se encuentra en tratamiento de quimioterapia, que no permitirá que se interponga o frene su activismo con el que constantemente suele promover los derechos humanos, el medio ambiente y hasta la salud reproductiva.
El cáncer es un maestro y estoy prestando atención a las lecciones que me ofrece. Una cosa que ya me ha mostrado es la importancia de la comunidad. De crecer y profundizar en la propia comunidad para no estar solo. Y el cáncer, junto con mi edad -casi 85 años-, definitivamente enseña la importancia de adaptarse a las nuevas realidades.
A juzgar por lo escrito en su publicación, Jane Fonda ha tomado con entusiasmo y buena actitud su enfermedad, así que está decidida a enfrentarla y darle batalla sin dejar que arruine los planes de vida que tiene hasta el momento.