Hoy nos sentimos enamoradas… de la vida, pero al final de cuentas, enamoradas. No podemos negar que nos brillan los ojitos y por eso quisimos ver algunas películas románticas que simplemente nos hacen suspirar y querer vivir una historia de amor similar.
Sin embargo, también existen algunas películas en las que no nos terminan de agradar las parejas principales, ya sea por recuerdos de relaciones pasadas, los actores no tienen nada de química o los personajes son tóxicos. Por ello te compartimos una lista de las cinco parejas de pelis que merecen todos nuestros aplausos y las cinco que no se llevan ninguno.
1. Vivian y Edward en Mujer Bonita
Nadie puede negar que se complementaban perfectamente.
2. Christian y Anastasia en 50 sombras de Gray
No nos gusta mucho la idea de someterse y que el chico la trate como si fuera de su propiedad.
3. Jenna y Matt en Si tuviera 30
¿Casarse con tu crush de la infancia? Claro que sí.
4. Noah y Allie en Diario de una pasión
Aunque al final acaban juntos y muchas de nosotras pensábamos que era amor real, pues él le escribe cartas por todo un año, la verdad es que son muy irritantes y pelean por todo. ¡Bye!
5. Patrick y Kat de 10 cosas que odio de ti
¡Ah! La historia “adolescente” que nos encantó y nos hizo amar 10 cosas y más.
6. Nate y Andy de El diablo viste a la moda
Nate es un poco egoísta, de hecho, muchos fans piensan que él era el verdadero villano de la historia, pues en lugar de apoyar a Andy en sus sueños, se la pasa quejándose y haciendo que ella se sienta menos solo por querer alcanzar sus metas. ¿Tú qué piensas?
7. Rick y Evie en las películas de La momia
No nos dejarás mentir cuando decimos que su romance se roba el protagonismo en las pelis.
8. Pat y Tiffany en El lado bueno de las cosas
Esta pareja nos deja superclaro que para tener una relación sana, primero, debemos atender nuestros problemitas personales.
9. Kaz y Noni en Beyond the Lights
Una pareja que le apuesta a que primero hay que ser fiel a una misma. ¡Goals!
10. Sandy y Danny en Vaselina
¿Cambiar para que te acepten? ¡Jamás! Que nos quieran como somos, claro, mientras seamos sanitos.