Sufre de envenenamiento solar por no usar protector solar

El cambio climatológico cada vez es más extremo, por eso se deben tomar precauciones para evitar que afecte a nuestra salud. Esto lo ha entendido muy tarde una mujer que sufrió “envenenamiento solar” durante sus vacaciones.

Orla compartió en su cuenta de TikTok el resultado de haber ido a vacacionar a las costas de Cornwall, en Inglaterra, sin protector solar y la situación tan peculiar que vivió por no cuidarse como debía para obtener el bronceado perfecto.

De acuerdo con su testimonio, durante sus vacaciones, un buen día notó un enrojecimiento agresivo en la piel. Sin embargo, Orla pensó que era una reacción normal al haber estado expuesta bajo el sol, así que no le hizo mucho caso.

Pero todo cambió cuando horas más tarde se dio cuenta de que su rostro se estaba inflamando y, desde luego, comenzó a preocuparse. Pero, a pesar de esos síntomas, Orla abordó el avión de regreso a casa e incluso en el clip podemos observar cómo se coloca hielos en la cara para intentar desinflamar.

Sin embargo, esto no funcionó. Además, al aterrizar y bajar del avión, notó que tenía dificultad para abrir los ojos, pues sus párpados estaban muy hinchados. Debido a esto, Orla se dirigió al hospital y luego de realizarle varias pruebas y valoraciones, los médicos determinaron la causa de esta reacción.

De acuerdo al médico que analizó sus estudios, Orla sufrió un envenenamiento solar debido a que se expuso demasiado al sol sin usar ningún filtro de protector solar. Los especialistas afirman que este tipo de envenenamiento sucede cuando la quemadura es sumamente grave.

Debido a esto, Orla tuvo que someterse a un tratamiento para regular los efectos en su rostro y calmar el dolor del cuerpo. Eso sí, después de esta experiencia, la joven recomendó a todas las personas usar protector solar y cuidar lo más posible su piel, ya que cabe señalar que esto puede ocurrirnos a cualquiera de nosotras. Para prevenir te dejamos algunos de sus síntomas, que son: inflamación en la piel, fiebre, deshidratación, dolor de cabeza, ampollas e incluso náuseas.