Enfrentar una ruptura nunca será sencillo. Sin embargo, siempre encontraremos la mejor manera de hacerlo, ya sea pasando tiempo con las amigas, escribiendo nuestras emociones en un diario, haciendo ejercicio, yendo de compras, viajando o fingiendo una boda.
Sí, esta última técnica parece no ser la más madura de todas, pero hubo una chica que la puso en práctica, hasta contrató un fotógrafo profesional y rentó un vestido de novia. Lo curioso es que ella misma compartió la historia y aunque dice que no fue una buena idea, tampoco se arrepiente de sus actos.
https://www.tiktok.com/@sarahvilard/video/6961429477393976581?referer_url=https%3A%2F%2Fwww.nuevamujer.com%2F&referer_video_id=6961429477393976581&refer=embed
Recordando el momento en que fingí casarme y tener una sesión de fotos para vengarme de mi ex.
Sarah Vilard, de 24 años, armó todo espectáculo para vengarse de su ex, provocándole una ola de celos y arrepentimiento.
Ella cuenta que estaba enamoradísima de su ex, quien no tuvo piedad en traicionarla y terminar su relación. Aquella situación fue complicada de asimilar, pero lejos de ponerse a llorar o tomarse un tiempo para sí misma, Vilard creyó que la mejor manera de hacerle cara a este episodio era haciendo que su ex se arrepintiera de su decisión. Por ello planeó una boda falsa.
Vilard rentó un vestido, contrató un fotógrafo, acudió al salón de belleza por un maquillaje y peinado de novia e, incluso, logró que uno de sus amigos se hiciera pasar por su nuevo novio. Pero la cosa no paró aquí, también alquiló un salón de eventos, lo decoró y llevó algunos falsos invitados para la sesión de fotos.
Luego de unos meses, Vilard compartió las fotos en Instagram y recibió múltiples felicitaciones por parte de amigos y familiares, quienes no sabían qué ocurría, pero se sentían felices por ver que había encontrado “al amor de su vida”. Ella contestaba todos los mensajes como si su boda hubiera sido una realidad. Todo aquello llegó a ojos de su ex, quien comenzó a llamarla para tratar de arreglar las cosas. Sin embargo, ella nunca respondió. Más tarde, su ex fue a buscarla a casa para tratar de hablar, pero no lo recibió. Luego de todo aquello, lo eliminó de sus redes sociales y nunca volvió a tener contacto con él.
Al poco tiempo también borró sus fotos de Instagram y aclaró lo ocurrido. Además, afirmó que no se arrepiente de lo que hizo, pues aprendió una gran lección y en sus siguientes rupturas tomó todo con más calma.