Los bomberos suelen enfrentarse a situaciones tan peculiares que bien podrían escribir un libro de anécdotas con toque cómico. Sin embargo, ninguna de sus historias se asemeja a la del Cuerpo de Bomberos de Santa Barbara, California, en Estados Unidos, que realizó una movilización de emergencia tras el reporte de que una mujer que se encontraba a punto de caer de un acantilado.
La situación requirió de una rápida movilización en la que se incluyeron helicópteros y sensores de calor. Los bomberos se encontraban preparados para lo peor, pues sabían que el rescate debía ser meticuloso o las fallas serían fatales. Lo que nunca imaginaron ni planearon fue que la damisela en peligro resultaría ser un maniquí de utilería.
Los múltiples reportes de auxilio para ayudar a una mujer que pendía de un acantilado a 30 pies de altura y quien, al parecer, se sostenía con todas sus fuerzas posibles provocó la movilización de decenas de bomberos, quienes desplegaron todo un plan de emergencia para salvarla.
En el operativo se utilizó un helicóptero, un dron y un sensor térmico para detectar a distancia las condiciones de la zona y estado físico de la mujer. Fue hasta ese instante que los bomberos detectaron que la mujer no se movía y su temperatura era baja. Entonces observaron un poco más y detectaron que no se trataba de una chica, sino de un maniquí que llevaba una peluca de larga cabellera negra.
Al final, los bomberos se acercaron a la zona y retiraron el maniquí para evitar más confusiones. Además, realizaron una investigación sobre quién realizó aquella broma y descubrieron que todo se trató de un accidente.
De acuerdo con los reportes finales, un día antes del aviso, el sitio sirvió como set de filmación para una película de acción cuyo nombre no fue rebelado y, accidentalmente, la producción olvidó retirar el maniquí, provocando una gran confusión entre los transeúntes y dejando una gran y peculiar anécdota al Cuerpo de Bomberos, quienes compartieron la historia en redes sociales, provocando más de una carcajada.