La enseñanza es una de las labores más nobles que existen y también una de las más desafiantes. Estar al frente de un grupo grande de niños, adolescentes o adultos durante horas requiere de mucha paciencia y habilidad para captar y mantener su atención.
Por otra parte, es un trabajo gratificante porque, al compartir sus conocimientos y ayudar a otros a que descubran su potencial, facilitan el camino a las nuevas generaciones. Si eres maestro, más de una de estas imágenes te parecerá demasiado familiar.
1. El primer día de clases
No puedes ser más optimista.
2. La temporada de exámenes
Es como un retiro espiritual de tres días. Sin lo espiritual, claro.
3. Cuando te dicen que tu trabajo es fácil
Claro, 36 años y mira lo bien que luzco.
4. Esperando a que tus alumnos dejen de platicar
Y decidan atender la clase.
5. Nunca apreciaste realmente un fin de semana
Hasta que comenzaste a dar clases.
6. Te vuelves inmune al café
Por todas las noches que pasas corrigiendo trabajos.
7. Cuando quieren aprobar a toda costa
“No vine en todo el semestre, pero ¿puedo entregar un trabajo mañana para aprobar?” ¿Es en serio?
8. “Qué bien que agregaron nuevos contenidos al programa”
Dijo ningún maestro, nunca.
9. Ese alumno con el que no puedes
Incluso has tenido pesadillas en las que era el protagonista.
10. Y el que desearías que ya no participara
Ese pequeño sabelotodo inquieto.
11. La única constante son los resfriados
Con uno que comience a estornudar basta para desatar una alarma de epidemia entre todo el grupo.
12. Eres profesional del auto robo
Porque cuando eres maestra, es la única profesión en la que llevas suministros de la casa a la escuela para trabajar.
13. Dormir es un lujo desconocido
Porque aunque trates de dormir temprano, siempre tendrás trabajos por calificar, proyectos qué asesorar y además preparar la clase del día siguiente.
14. Cuando pasas 15 minutos explicando la actividad
Para que a los dos minutos de haber comenzado a realizarla, te pidan que les expliques otra vez.
15. Correo no deseado
Cuando recibes un correo y es de ‘ese’ padre incómodo que no encuentra la felicidad y desde el inicio del año se desquita contigo.
16. Cuando tratas de mantener la calma
Aunque por dentro te consuma la ira pero tienes que ser amable porque estás en el trabajo.
17. Cuando no sabes la respuesta a una pregunta
Sólo contestas que eso se ve en otra materia.
18. Los fines de semana sigues despertando temprano
Maldito reloj biológico.
19. El look al final del año escolar
Es inevitable.
20. Pero quien ríe al último, ríe mejor
Y cuando llega el verano, mientras todos trabajan como siempre, en tu vida todo es risas y alegría.