Si eres una chica que creció en los 90, eres parte de la última generación que tuvo oportunidad de disfrutar plenamente la lluvia de películas, juguetes y caricaturas más divertidos del mundo. Los festivales de la escuela no incluían canciones de reguetón sino poemas, tablas rítmicas y algunas veces hasta disfraces.
Seguramente con la llegada de la primavera, y al ver a tus sobrinos ir al kínder vestidos de abejitas, recordaste aquella vez en la que tu mamá te vistió de florecita o por lo menos esa era su intención; lamentablemente falló en el intento.
1. Cada festival tenía su pollito
No importaba que el clima estuviera a 40° C; tus compañeros tenían que aletear fuerte.
2. Cuando quisiste ser una rana
Pero terminaste siendo un chapulín.
3. El clásico de cualquier niña
Si no fuiste florecita, fallaste como popular.
4. Cuando tu mamá te decía que eras la tortuga más bonita de la escuela
Pero parecías un trozo de milanesa empanizada.
5. Una oruga que soñó con transformarse
En… ¿Teletubbie?
6. Como cuando no te decides por ser una flor o el sol
Pero tu mamá igual te apoyaba.
7. Cuando la maestra te incluía de último minuto
Y te tocaba ser el árbol número tres.
8. ¡Reina del sol!
De los adornos navideños y de todo el papel lustre de la papelería escolar.
9. Porque desde la guardería tu mamá tenía las mejores ideas
En verdad a nadie más se le ocurrirían.
10. Así de feliz te veías en cada festival
Bueno en realidad no, solo cuando te obligaban a usar el disfraz menos simpático del momento.
11. ¿Una vendedora de empanadas?
Tal vez a alguien le diera hambre durante el festival.
12. El loro más aterrador de la primavera
Por lo menos estaba seguro de una cosa: nadie le quitaría sus globos.
13. Cuando tu mamá cobraba venganza por no comerte las verduras
Y te convertía en una brócoli.
14. Pero piénsalo, por lo menos no fuiste el pasto de la obra
Eso sí hubiera sido triste.