Sin duda, una de las cosas en las que se va la mayor parte del dinero es en la comida, ya que es una necesidad básica que ahora se ha convertido también en un placer, pues ¿quién no ama disfrutar de un delicioso platillo?
Recibir comida de verdad causa mucha felicidad, sobre todo cuando es gratis, pero ¿qué pasa cuando fusionamos el placer de la comida con un experimento social? Esto es lo que un usuario de la red social Facebook conocido como Amigrifo Morado quiso averiguar.
En días pasados, este usuario con más de 130 mil seguidores subió un video a la red social donde narra que va hacia un restaurante lujoso de la Ciudad de México para fingir ser un crítico de comida y ver cómo lo tratan, obviamente esperando obtener comida gratis.
Conforme va avanzando el clip, se observa al usuario degustando los distintos platillos y bebidas del menú. En total, el paquete que él pidió incluía una crema de entrada, un pollo empanizado como plato fuerte, un aguachile, un postre y dos bebidas por un precio de 1420 pesos mexicanos (71 dólares aproximadamente).
El chico grabó y comentó cada plato que iba probando. Además, se aseguró de llevar una libreta para hacer sus críticas de manera escrita y así parecer interesante ante el personal del restaurante.
En video podemos ver que un mesero se le acerca y le lleva una cerveza artesanal, así como unos canapés que él no pidió, por lo que pensó que había surgido efecto su actuación como crítico y empezarían a enviarle comida gratis.
Casi al final del video, un sujeto le dice que toda la comida tenía “truco”, refiriéndose a que todo había sido infusionado con cannabis como forma de “venganza” de los chefs por fingir ser un crítico culinario. Sin embargo, el Amigrifo no lo creyó, pues dijo que no le sabía a hierba en lo absoluto.
Una vez terminada la comida, los chefs fueron a su mesa y le confirmaron que sí habían puesto el psicotrópico en toda la comida. Para ese momento ya le había hecho efecto y realmente terminó drogado.
Amigrifo Morado se dedica a hacer videos de humor que involucran probar comidas, hacer bromas, entre otros temas varios, por lo que los usuarios no le creyeron que su experiencia como crítico haya sido real.
Ni cómo culpar a los escépticos, pues es verdad que muchas cosas no cuadran del video, como que al ser un restaurante de lujo le sirvieran bebidas en vasos de plástico y unicel o que él no hablara ni se comportara como un verdadero crítico hubiera hecho y que sería ilegal darle sustancias a alguien sin su consentimiento.
Si bien todo fuera un video de broma, no se puede negar que la idea es algo inteligente, aunque puede no resultar de la mejor manera. De cualquier forma, el video se viralizó y le sacó una sonrisa a más de un internauta.