A menudo nos llaman antisociales, huraños, inadaptados o ermitaños, cuando en realidad sólo somos introvertidos. No es que no nos guste convivir con el resto del mundo (por lo menos no es así todo el tiempo); simplemente tenemos una idea diferente de la diversión. Un buen libro, escuchar música acompañada de una copa de vino, quedarte en pijama el fin de semana y ver un maratón completo de series, cualquier momento que implique estar a solas es tentador y muy disfrutable.
Para la mayoría de las personas, este comportamiento no sólo es extraño sino incompresible. Si de alguna forma te sientes identificada, eres una más del club de los introvertidos, y seguro entenderás cada una de estas ilustraciones de Introvertdoodles.