Ser torpe a la hora de coquetear es una de las peores cosas que te pueden pasar. Tú intentas parecer sexi e interesante pero todo te sale al contrario de lo que esperabas, mientras tus amigas te dicen que seas tú misma y que el coqueteo debe ser natural.
Pero cuando ya lo has intentado más de tres veces, piensas: ¿por qué no dan clases de ligue en el colegio? Tal vez esa asignatura hubiera sido tu salvación en más una de estas 15 incómodas situaciones.
1. Dices chistes malos
Quieres agradar tanto a tu prospecto que terminas por decir chistes que no harían reír ni a tu abuelita.
2. Dejan en visto tus mensajes largos
Te emocionaste tanto que mandaste un mensaje con extensión de una carta, solo para decirle el gusto que te dio saludarlo.
3. Siempre terminas ofendiendo
Cuando comienzas a bulear a tu ligue, no puedes parar y él solo termina odiándote.
4. Crees que ignorándolos los acerca más
La realidad es que muy dentro de ti sabes que no te interesa nadie.
5. No dejas de hablar
Tus nervios te traicionan y el parloteo no se detiene.
6. Lo peor de todo es que solo hablas de tu mascota
No entiendes por qué lo haces, pero tampoco puedes dejar de hacerlo, es como un mecanismo de defensa.
7. Siempre haces algo tonto
Te tropiezas, escupes, derramas algo sobre tu ropa, cualquier cosa que te haga sentir que hacer el ridículo.
8. Le arruinas el ligue a tu galán
Hasta quien te está ligando termina por arrepentirse, porque tú y la palabra ligar no se llevan.
9. Eres demasiado extremista
Aquí solo hay de dos: nunca sabes cómo devolver un coqueteo o eres demasiado obvia. Cualquiera de las dos genera pésimos resultados.
10. Envidias a la gente que sabe ligar
Aunque les has sonreído y preguntado sutilmente: “¿cómo lo haces?”, tu yo interior no deja de envidiar sus habilidades.
11. Interactuar con un chico lindo te causa terror
Pareciera una broma que cuando has encontrado a un chico guapo tus nervios se disparan y terminas huyendo de tu única oportunidad.
12. Piensas en todas las cosas que podrían salir mal
Por fin conseguiste una cita, pero terminas cancelando porque tu mente te ha dado tres mil razones por las cuales no deberías ir.
13. Tu ingenuidad acaba con los momentos sexis
Has querido lucir linda para tu crush y eso ha provocado que elijas el outfit menos adecuado en más de una ocasión.
14. Tu versión del coqueteo no se acerca a la realidad
Una charla de temas irrelevantes te es suficientemente romántica.
15. Jamás le has dicho a alguien que te gusta
La idea de que él ya lo sabe o de que alguien más le contó es suficiente, no hay por qué complicarse la vida.