Cientos de chicas nos hemos preguntado lo mismo: ¿por qué el clima de verano y el maquillaje no pueden ser amigos? Y es que disfrutas el verano y el sol con la cara lavada pero segura de que no te derrites como helado, o inviertes en maquillaje que en menos de unas horas ya se corrió y deberás retocar.
Tantos meses sobreviviendo a la temporada invernal; ahorrando dinero para tus vacaciones; la rutina de ejercicios que seguiste una semana antes de irte a playa; todo ese esfuerzo para que en el momento de la verdadera acción en verano, tu cara se derrita como vela encendida… Triste, como los siguientes 15 momentos que toda chica que ama el maquillaje y odia la pesadilla veraniega, podrá entender.