Seguramente, cada vez que has escuchado a una mujer quejarse por sus grandes senos habrás pensado que bromea o simplemente alardea de sus atributos, pero resulta que tener unos pechos más grandes que el promedio puede ser un verdadero problema.
Al parecer, con cada una de las estaciones del año sufren de distinta manera, por lo que me han hecho pensar que tener las bubis grandes, lejos de ser una ventaja, es casi una maldición. Así que adiós a las envidias por la copa C. Estas 13 razones te harán pensar de diferente sobre el tema.
1. Los suéteres te hacen ver gorda, al grado de parecer embarazada
Los suéteres suelen ser un problema agobiante, ya que durante el invierno puede arruinarte la vida. ¡Volumen y más volumen! Lo único que provocan es que te sientan asfixiada, y más si se habla de cuellos de tortuga.
2. ¿Un vestido corte imperio?
¿Cómo meter una copa C en un vestido de corte imperio? Desafortunadamente para estas chicas, lo único que causará este tipo de prendas es que aumente instantáneamente unos kilos.
3. No puedes alquilar ningún disfraz
No importa de lo que se quieran disfrazar, por más que busquen no encontrarán uno que les quede bien. No se trata de que estas mujeres copa C estén excedidas de peso, la realidad es que son pocas las mujeres que gozan de esos atributos.
4. Siempre tendrás escote
Aunque no lo quieras más en tu vida, con todas las blusas, abrigos, vestidos con todo, siempre se formará un escote y tus atributos sobresaldrán.
5. Adiós a los collares
Definitivamente no pueden utilizar collares: “Menos es más”, y no querrán agregar más miradas hacia esa parte.
6. Todos pueden participar en maratones… pero tú los verás por televisión
El movimiento constante de sus pechos mientras corres, más que un atractivo, resulta molesto y algunas veces doloroso. Para evitar futuros problemas cervicales no correr es tu mejor opción.
7. No tienes absoluta idea qué talla de abrigo usar
Es difícil para una mujer con estas características lograr encontrar su talla correcta en cualquier tipo de prenda entallada.
8. Los cinturones de seguridad las ahorcan
Nada más incómodo para ellas que el sentirse asfixiada con sus propias bubis: el cinturón de su coche parece que las quisiera matar. ¡Qué desesperante!
9. La gente te pregunta si son reales
¿Qué molesto, no creen?
10. Siempre predispuesta al botonazo
Ponerse una blusa de botones es toda una osadía. Si vas a la oficina, las miradas masculinas te seguirán por todos lados.