Todos tenemos esa amiga que no se puede quedar callada mientras los demás hablan; a quien cualquier historia ajena solo le hace recordar una anécdota “más interesante” que ella vivió ; la que te pregunta más de 10 veces cómo se le ve su nuevo vestido; esa amiga que no soporta mujeres desconocidas en su grupo de amigos porque la única chica que puede figurar es ella.
¿Te suena familiar? Querida, lamento anunciarte que si no conoces una amiga así, tú podrías ser esa amiga. Y tal vez no te das cuenta porque inconscientemente eres la diva de tu séquito. Nada ni nadie puede ser más importante que tú, y si algo lo contradice, esto puede frustrarte. La verdad es que estas actitudes cansan, y si estás dispuesta a mejorar ese ego elevado y ser un poco más como el resto de tus mortales amigos, lo primero que debes tener en cuenta es la aceptación. ¿Cómo lograrlo? Aquí 18 señales de que te fascina ser el centro de atención.
1. Te duele que la gente no se acuerde de tu cumpleaños
Porque eres así como de: “¿cómo pudieron tener en mente otra cosa que no fuera celebrar este día TAN importante?”. Incluso si es el compañero de trabajo al que tú jamás saludas, si él olvida tu cumpleaños, te lo tomarás muy personal y le dejarás de hablar por unos meses.
2. Te importa salir bien en las fotos
Es decir, si te toman una foto en la que tú te ves increíble pero los demás se ven mal, a ti te da lo mismo, de igual manera la subes.
3. Odias que la gente no se fije en ti
Por ejemplo, te pone de malas que no noten tu nuevo corte de cabello, tus zapatos nuevos o que por fin bajaste esos dos kilitos de más.
4. Te stalkeas a ti misma
Te la vives imaginando qué se sentirá ser “ellos” (la pobre gente miserable que no es tú), y te acosas a ti misma solo para reafirmar que sí, eres genial, y no culpas para nada a los haters que intentan ser como tú.
5. Haces bromas pero no soportas que te las hagan a ti
Es decir, eres de humor pesado con tus amigos, pero que no se atrevan a hacer una broma sobre ti porque abrirán las puertas del infierno y no será nada agradable.
6. Te la vives tomándote fotos
Y de inmediato las subes a tus redes, porque “tu público” está obsesionado contigo, así que debes darles material para que admiren tu grandeza.
7. Tu Instagram está lleno de selfies
Hay demasiadas cosas interesantes en este mundo: paisajes, animalitos, lugares, arte, el cumpleaños de tu abuelita, pero no, nada será más hermoso que tu bello y bien perfilado rostro.
8. Las personas que te gustan siempre se parecen a ti
Inconscientemente necesitas de alguien igual a ti; desde el físico hasta la actitud, solo sabes fijarte en esas cosas bellas que te recuerdan a tu persona favorita: tú misma.
9. Tu eres tu comediante favorito
Te ríes sola de tus chistes, y relees tus propios tuits porque piensas que de verdad eres la persona más divertida que conoces.
10. Necesitas mirarte cada vez que pasas al lado de un espejo
Has llegado a la conclusión de que hasta cuando no lo intentas, te ves hermosa y perfecta. *emoji de manitas pintándose las uñas*
11. Amas ser el centro de atención
Nadie se viste, baila, platica, canta, ríe o convive mejor que tú; así que ¿para qué negarlo? Eres perfecta en lo que haces: ser tú misma. ¿Por qué no hacerlo con toda una profesional? Al diablo los demás.
12. ¿Tu peor pesadilla? Que alguien compre el mismo vestido que tú
“OH, POR DIOS… ¡CÓMO TE ATREVISTE A HACER ESO!”.
13. Tu fondo de pantalla es una foto tuya
Cuando no andas muy de humor, solo dejas una foto tuya con tu perro, pero en general, siempre deben ser tus selfies donde sales increíble.
14. Soportas todo, menos trabajar en equipo
El hecho de tener que “considerar” la opinión de los demás te pone triste, pues sabes que tu mejor equipo eres tú misma. No necesitas un lastre de más de dos personas que te propongan ideas inútiles.
15. Eres buena manipulando gente
Por ejemplo, sí quieres ser el centro de atención en una plática sabes justo qué preguntas hacer, solo para que te pregunten lo mismo y, ahora así, hacer la conversación mucho más interesante: sobre ti.
16. Las video llamadas son lo tuyo
Eso sí, no puedes comenzar sin antes una buena rutina de maquillaje, solo para verte espectacular, como de costumbre; buscas la luz adecuada, arreglas tu fondo y una vez comenzada la videollamada, no puedes evitar estar viéndote TODO el tiempo.
17. Aceptas a cualquier desconocido en tus redes
No importan “sus intenciones”, para ti cada seguidor es un prospecto de creador de likes; mientras ellos disfrutan de tu existencia, tu te enriqueces, es un ganar-ganar.
18. Te encanta dar consejos que nadie te pidió
Sobre todo ese tipo de consejos que solo elevan tu ego y te hacen pensar que eres mejor que los demás por no equivocarte en esos errores que apenas hace poco dejaste de cometer.