Son muchas las chicas que suben tutoriales a Instagram y hacen que el maquillaje sea un trabajo sencillo. Parece que han nacido con la increíble habilidad de hacer contouring, y del delineado de ojos mejor ni hablamos porque es una línea tan perfecta que hasta la persona con más pulso del mundo fallaría al hacerla.
Pero cuando el resto de las chicas, las que no somos fanáticas del maquillaje, llevamos a la práctica todo lo que vemos en los videos el resultado es un completo desastre. El smokey eye termina haciéndonos lucir como un panda, el pegamento de las pestañas postizas acaba sellando nuestros ojos y el glitter se esparce por todo el rostro. Si aún lo dudas, entonces tienes que ver estas 10 pruebas que demuestran que el maquillaje de Instagram y el de la vida real no tienen nada que ver.