“El que quiere, puede” es la frase que mejor define a Don José, un abuelito de avanzada edad, quien en conjunto con su familia vende zapatos tejidos en las calles de la Ciudad de México.
Don José es un emprendedor más al que por su edad e ingresos se le complica promover su trabajo artesanal en comparación con las grandes empresas; por ello, pidió ayuda a los transeúntes para que lo viralicen en redes y así impulsar su negocio.
Nunca te des por vencido
Don José sale todos los días a trabajar para llevar el sustento a su casa, e instala su pequeño puesto ambulante afuera de la estación Chilpancingo de la línea 1 del Metrobús de la Ciudad de México.
Ahí vende unos coloridos zapatos tejidos a crochet que sus hijas fabrican diariamente. Cada par tiene un valor de 8 dólares (180 pesos mexicanos), vienen en diferentes tallas, colores y formas. Por si fuera poco, son tan cómodos que no querrás quitártelos, en especial durante la temporada otoño-invierno.
Todos podemos ayudar
Don José pone todo su esfuerzo por vender el calzado, pero no siempre es suficiente, así que pidió ayuda a una de sus compradoras para que promoviera su trabajo de boca en boca, pero ella tuvo una mejor idea y compartió en redes la historia de este empeñoso abuelito.
Su nombre es José, es originario de Michoacán y actualmente radica en la Ciudad de México. Sus hijas tejen los zapatos y él los vende. Me pidió le haga publicidad y recomiende sus zapatitos para descanso. Solo $180 pesos mexicanos (8 dólares).
Está por el metrobús Chilpancingo de la Ciudad de México. Apoyemos como buenos mexicanos.
Posdata. Están padres.
Por suerte, la publicación se volvió viral y cada vez son más las personas que ayudan o hacen pedidos especiales de calzado a Don José. No hay duda de que internet es el sitio donde nacen los sueños.