Aunque la estructura del esqueleto humano no conoce de diferencias, hay otras estructurales que sólo se perciben a simple vista. En Santa Mónica, California, se reunieron decenas de personas el día de San Valentín y pudieron observar en una pantalla gigante de rayos X a personas interactuando: jugando, abrazándose, besándose. Mientras los espectadores estaban atentos, sus expresiones fueron capturadas con una videocámara.
Su sorpresa cada vez que quienes están tras la pantalla pasan al frente, que forma parte del video de la campaña llamada Love has no labels (“El amor no tiene etiquetas”), hecho contra la discriminación y la intolerancia, ha conseguido millones de vistas. Dos días después de publicado ya contaba con 14 millones de reproducciones.
La idea surgió del Ad Council, organización que realiza campañas sin fines de lucro.
“Antes que nada, todos somos humanos. Es tiempo de abrazar la diversidad. Dejar las etiquetas a un lado, en nombre del amor”, son las palabras que nos reciben en la página web lovehasnolabels.com.
Esta acción (fue respaldada por ocho organizaciones, entre ellas Human Rights Campaign y la Liga Anti-Difamación, que en sus respectivas páginas proporcionan consejos para la lucha contra los perjuicios en la vida social, el trabajo y la escuela; también ofrecen un test para que los lectores tomen conciencia sobre sus actitudes discriminatorias.
Ad Council ya ha realizado otras campañas, pero ninguna había tenido tanto éxito como ésta. “Decidimos llevarla a cabo porque nos pareció que era muy importante animar a la gente a examinar sus prejuicios inconscientes”, dijo Lisa Sherman, la presidenta del consejo, en una entrevista.