“El cáncer no me detiene de ser una princesa” es el mensaje de la joven de 17 años Andrea Sierra Salazar, quien ha decidido lanzar un importante mensaje en las redes sociales a través de una serie fotografías en las que aparece modelando sin cabello.
“Tu cabello no te define”, agrega esta joven de McAllen, Texas, que está dando la vuelta al mundo por ser un increíble ejemplo de fortaleza, perseverancia y de la voluntad para hacer frente a una tragedia.
Después de haber sido diagnosticada con linfoma de segundo grado, supo que tendría que estar ausente de la escuela por dos meses para pasar por un tratamiento de quimioterapia.
Sólo escuchar la palabra cáncer podría ser el fin para muchas personas; sin embargo, esta chica es un ejemplo de perseverancia. Para mantener sus esperanzas su madre le propuso invertir su tiempo libre en hacer algo que siempre quiso: ser modelo.
El tratamiento contra el cáncer le hizo perder su cabello, así que decidió posar con peluca en sus primeras fotos, el problema es que no se sentía del todo cómoda. Después de estar buscando en varias agencias, ella aceptó hacer una sesión de fotos con Gerardo Garmendia, sólo que esta vez lo hizo sin peluca.
“Al principio no me sentía muy cómoda, pero luego entendí que no había razón para sentirme apenada por la forma en la que lucía. Por el contrario, debía sentirme orgullosa”.
El resultado fueron estas fotografías, donde no sólo luce bella, sino además como esa mujer empoderada que pretende transmitir un mensaje al mundo.
La joven luce como una verdadera princesa, sin cabello, pero ¿quién dijo que todas las princesas deberían tenerlo? Las fotografías son impresionantes.
Esta sesión fotográfica muestra los cambios que sufre el cuerpo de una persona bajo el tratamiento de quimioterapia, pero a su vez muestra ese elemento de feminidad y sofisticación que la hacen lucir realmente bella.
“Antes de la quimioterapia siempre fui una persona segura, pero cuando comencé a perder mi cabello me miraba al espejo y me daba cuenta que había perdido toda esa seguridad”.
Pronto supo que quería hacer esas fotos al natural, sin peluca, sin nada que esconder y que su ejemplo serviría de inspiración a otras muchas chicas en el mundo que atraviesan por el mismo problema.
“Quiero que todas sepan que el cabello o los atributos físicos no definen a una persona, lo que realmente importa es tu belleza interior, la forma en la que tratas a los demás, que seas una buena persona”.
Ella se unió a un pequeño grupo de sobrevivientes de cáncer que también están mostrando los efectos secundarios del cáncer para demostrar que no se dan por vencidos y que son valientes en todos sus viajes.
En 2015, el modelo canadiense Elizaveta Bulokhhova posó en una serie de fotografías artísticas después de perder parte de su mandíbula para el tratamiento del cáncer. Durante semanas, ni siquiera podía reunir el valor para hacer frente a su reflejo en el espejo.
Las fotografías son un mensaje a todos aquellos que están atravesando por una situación de este tipo: el cáncer no puede detener la verdadera belleza de una persona.
“Junto con muchas otras cosas, este viaje me ha enseñado a amar y aceptarme a mí misma, independientemente de la manera en que me veo”.
“Como madre no tengo palabras para agradecerle a Dios principalmente y a todas las personas maravillosas (la lista es interminable) que han apoyado a mi hija durante este tiempo tan duro de su tratamiento contra el cáncer. La han ayudado a pasar unos momentos felices e inolvidables aun en la adversidad. Gracias a Dios ella se encuentra excelente de salud. Y los logros siguen, lo fabuloso de todo esto que el ejemplo y la fortaleza de ella esté sirviendo para muchas otras personas a motivarse. Gracias y que Dios nos bendiga a todos”.