La vida de todos ha dado un giro de 180° en los últimos meses: hemos aprendido a trabajar desde casa, a tomar clases en línea e incluso hacemos reuniones con amigos y familiares por videollamada debido a la contingencia por el Covid-19.
Para Kristina, una joven con síndrome de Down, esta situación también la afectó, pues perdió su empleo como voluntaria en una guardería, además, tuvo que aprender a hacer algo más con todo el tiempo libre que tenía y lo que ha logrado es asombroso: ahora es dueña de su propio negocio.
Una joven con grandes sueños
Kristina y su familia son originarios de Carolina del Norte, Estados Unidos y aunque ella tiene síndrome de Down todos sus conocidos saben que es capaz de hacer lo que ella se proponga en la vida. En el 2019 se graduó de South View High School y comenzó como voluntaria en una guardería de la ciudad, sin embargo, el cierre indefinido tanto de las escuelas como negocios por la situación que acontece en el mundo la forzó a dejar de estar tan activa como antes, lo que en un principio le agradó, pero más tarde comenzó el aburrimiento, razón por la cual pidió a su familia comenzar algo nuevo.
¡Tiene su propio negocio!
Tras algunos meses de confinamiento, Kris decidió que era momento de innovar, fue así como el pasado 20 de agosto de 2020 se inauguró Kristina’s Grinds and Grace, un pequeño negocio de café que ha servido como distracción y aprendizaje. A pesar de que el horario de apertura es corto, pues de lunes a viernes trabaja de 3:00 p.m. a 5:00 p.m. y los sábados está de 10:00 a.m. hasta el mediodía, disfruta de ello y ha aprendido a ser más sociable, incluso tiene nuevos amigos.
Es más feliz que nunca
Ahora que Kristina tiene su propio negocio, el cual ha tenido gran popularidad, ha decidido incluir en sus ventas playeras y termos, pues sabe que podrían gustarle a los clientes, además, tiene la firme intención de tener su propia cafetería y sabe que el haber comenzado con un carrito de café es solo el inicio de una gran aventura, por si fuera poco también desea que sus empleados sean chicos igual a ella: con capacidades diferentes pero dispuestos a salir adelante a pesar de todo.
¡Felicidades, Kristina!