Si hay una frase que describe a la perfección la amistad de Parker Keith y Adrianna Rust es “Quien tiene un amigo, tiene un tesoro”, pues después de compartir años de estudio, aventuras y secretos, decidieron asistir al baile de graduación juntos.
Al principio, la idea les encantó a ambos, pero al paso de unos días, Adrianna le pidió a Parker que buscará otra compañera de baile, pues ella no asistiría porque no tenía los recursos suficientes para comprar un vestido y calzado adecuados. Parker le dijo que encontraría a alguien más con quien asistir, pero en secreto, aprendió a coser y diseñó un vestido exclusivo para sorprenderla con una pieza digna de un cuento de hadas.
Como en un cuento de hadas
Adrianna soñaba con la noche del baile de graduación y su mejor amigo Parker lo sabía. Sin embargo, ella tuvo que dar por cancelado su sueño al no tener los recursos suficientes para costear un vestido adecuado. Cuando su amigo se enteró de lo que ocurría, bromeó diciendo que él le haría un vestido, que no tendría de qué preocuparse.
Ella en realidad creyó que las palabras de Parker solo eran una broma y se olvidó del baile de gradación. Mientras tanto, Parker diseñaba un vestido estilo Cenicienta y aunque es muy talentoso en el dibujo, jamás había trabajado con una máquina de coser, por lo que tuvo que tomar un tutorial en YouTube para llevar acabo su objetivo.
El joven pasó varios meses trabajando en el vestido para su amiga y tuvo que rehacer algunas piezas una y otra vez. Al final, el resultado valió la pena, pues Adrianna se veía como toda una Cenicienta de la vida real en un vestido azul cielo decorado con tul. Por si fuera poco, Parker se encargó de comprarle unas zapatillas. Su historia llegó a redes sociales, viralizándose y demostrando que la verdadera amistad sí existe.