Mary Otunba, originaria de Nigeria, pasó los últimos años durmiendo en edificios en construcción y/o abandonados, pues no tenía recursos suficientes para pagar hospedaje mientras estudiaba en la universidad.
Después de años de esfuerzo y dedicación, logró graduarse con honores, consiguió el trabajo de sus sueños y en su perfil de LinkedIn compartió su inspiradora historia de vida, motivando a otros a luchar por sus propias metas.
Todos los sueños son posibles
La educación siempre ha sido importante para Mary y su familia. Sin embargo, los recursos en su hogar no eran suficientes para continuar con sus estudios, pero la suerte estuvo de su lado y consiguió anotarse en una pasantía en el Instituto de Contadores Públicos de Nigeria, el mejor de toda África.
Todo parecía ir de maravilla, pero su padre murió de manera repentina. Su mundo se vino abajo, no tenía dinero para pagar sus estudios, alimentarse o vivir.
Cada esfuerzo tiene su recompensa
A pesar de tener todo en su contra, Mary descubrió la manera de hacer frente a sus problemas. Combinó sus estudios con un trabajo de medio tiempo, se limitó a ciertos gustos, dormía en edificios en construcción, soportaba hambre y usaba la luz de su teléfono celular para iluminar sus noches mientras estudiaba.
Gracias a los amigos que guardaron mi ropa y me alimentaron, me convertí en un Contador Público por certificación en 2019.
Mi experiencia a lo largo de los años me ha enseñado que la vida es por etapas. Todo lo que necesito es disfrutar cada una de sus partes, porque esto no durará para siempre.
Mary logró su objetivo y se convirtió en fuente de inspiración para otros que, al igual que ella, luchan cada día por alcanzar sus metas. ¡Nunca se den por vencidos!